Nueva Zelanda y Argentina se vuelven a enfrentar tras la histórica victoria de los sudamericanos hace pocas semanas. Los All Blacks, como en todos los encuentros, hacen su tradicional 'haka' antes del pitido inicial. pero esta vez con un homenaje especial a Diego Armando Maradona, fallecido el pasado miércoles.
El capitán Sam Cane posó sobre el césped una camiseta de la selección neozelandesa de color negro, con el "10" y el apellido de El Pelusa en blanco. Este gesto, previo al haka, fue su particular homenaje al astro argentino, que esta semana falleció a los 60 años.
Las selecciones de rugby de Nueva Zelanda y Argentina se enfrentan este sábado en la ciudad australiana de Newcastle, en la quinta jornada del campeonato Tri-Nations.
Despedida en privado
Apenas una treintena de personas participó del último adiós al 'Pelusa' en el cementerio, donde se realizó una ceremonia religiosa presidida por un sacerdote junto al féretro, envuelto en una bandera argentina. En la despedida íntima participaron familiares de Maradona, entre ellos sus hijas Dalma y Gianinna, su exesposa Claudia Villafañe y su exrepresentante Guillermo Cóppola. La ceremonia fue privada y duró cerca de una hora. Fue el final de una jornada marcada por un adiós popular no exento de demostraciones de dolor, pasión futbolera y hastaviolentos disturbios callejeros. Por decisión de la familia, los restos de 'el 10' fueron velados en una capilla ardiente montada en una de las salas principales de la Casa Rosada, sede del Ejecutivo.
La capilla ardiente estuvo abierta al público durante casi doce horas en las que fue incesante el paso de miles de fanáticos del exfutbolista, fallecido el miércoles a los 60 años de edad. La fila para ingresar a la Casa Rosada se extendió casi dos kilómetros y los incidentes se desataron cuando algunos fanáticos, temiendo no poder acceder ante el inminente cierre de la capilla ardiente, tumbaron vallados y se enfrentaron con la Policía.