Era el final del año 2008 y Fernando Alonso había salido de una época muy dura en McLaren. El Mundial se le había escapado tanto a él como a su compañero Lewis Hamilton y buscaba equipo desesperadamente, momento en el que Christian Horner llamó a su puerta.
El director de Red Bull asegura en motorsportmagazine.com que negociaron con el asturiano un contrato de dos años, pero sólo quería estar un año por que veía "seguro un contrato con Ferrari en 2009".
"La conversación más seria fue la primera y se perdió la oportunidad", revela Horner, que definió como "rara" la presencia de Flavio Briatore en las negociaciones, que intentaba ficharle para Renault.