Dos paracaidistas brasileños murieron cuando participaban junto a otras 28 personas en un intento de formar los aros olímpicos en el aire, informaron las autoridades del estado de Sao Paulo.
Según el informe de la Policía Civil, el accidente, al parecer provocado por el enredo de los equipamientos de ambos paracaidistas en su descenso, ocurrió el miércoles en Boituva, a 117 kilómetros de Sao Paulo -la capital regional-, considerada uno de los polos nacionales para la práctica del paracaidismo.
En el accidente, que ocurrió al final de la prueba de acrobacia colectiva, murieron Gustavo Correa Garcez, de 39 años, campeón nacional y con varios récords suramericanos, y Guilherme Bastos Padilha, de 47 y también instructor de paracaidismo.
Bastos Padilha murió víctima de un traumatismo craneano y Correa Garcez consiguió ser llevado con vida a un hospital de Boituva, donde falleció minutos después.
Los equipamientos pasarán por una pericia policial para determinar las causas del accidente. El Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, que comenzarán el 5 de agosto, señaló que la actividad de los paracaidistas no formaba parte de la preparación para la ceremonia inaugural de la cita veraniega.