Nadal y López se encuentran entre las cuatro parejas supervivientes que se repartirán las tres medallas del dobles, por lo que tienen la presea al alcance de la mano. Si solventan su complicado compromiso contra los canadienses Daniel Nestor y Vasek Pospisil, que también arrollaron a los italianos Fognini y Seppi (6-3, 6-1), tendrán asegurada al menos la plata.
Tras su buen debut contra los belgas Haase y Rojer (6-4, 6-4) y tener que batallar tres sets ante los argentinos Del Potro y González (6-4, 6-7, 6-3), el tercer duelo en Río fue el más cómodo para los españoles, que dominaron de principio a fin ante unos rivales desarbolados.
Así, casi doblaron en golpes ganadores a Marach y Peya (25-13), que no pudieron apuntarse ni un 'break y tiraron la toalla en el segundo set, cuando encajaron cuatro juegos consecutivos sin oponer apenas resistencia.
Algo más exigente fue el primer parcial, aunque Nadal, que jugó horas antes ante Andreas Seppi y que está visiblemente motivado igual que se le ha visto estos días en el torneo de individuales, derrochó talento cuando lo requirió la ocasión y volvió a mostrarse muy bien acoplado con un especialista de dobles como López. Finalmente, bastó una hora y 11 minutos para cerrar un encuentro más cómodo de lo esperado.
Cerca de su segunda medalla olímpica
De esta forma, Nadal está a un paso de la segunda medalla olímpica de su carrera, tras el oro individual de Pekín 2008, mientras que su compañero está cerca de colgarse la primera.
En la otra parte del cuadro, los estadounidenses Jack Sock y Steve Johnson, verdugos de David Ferrer y Roberto Bautista, disputarán la otra semifinal contra los rumanos Florin Mergea y Horia Tecau.