La calidad de España en el mundo del balonmano está más que contrastada. Una liga semiprofesional, en la que existe una isla solitaria en los cielos (el FC Barcelona) y en que el resto de equipo no pueden soñar ni siquiera con competir, exporta generación tras generación un gran número de jugadores competitivos e inteligentes que los equipos europeos se rifan.
No sólo el balonmano español exporta buenos jugadores, porque en la categoría en la que más destaca son los entrenadores. Las selecciones internacionales se rifan a los técnicos nacionales para explotar su competitividad y aumentar el nivel de selecciones más discretas.
Quitando a Jordi Ribera, actual seleccionador español, hasta otros tres técnicos se encuentran en los banquillos de selecciones rivales de los Hispanos en su viaje hacia el tan ansiado Oro Olímpico. A estos habría que sumar a otros cuatro que pelearon por estar en París y que finalmente se quedaron en el camino.
Jordi Ribera, el alquimista de los Hispanos
El entrenador catalán, Jordi Ribera, lleva dirigiendo a la selección española desde 2016. El entrenador español ha sido el primer técnico nacional en llevar a los Hispanos hasta la conquista del Europeo, el tan ansiado título que llegó por primera vez a las vitrinas en 2018. El campeonato más difícil de ganar el mundo del balonmano estuvo en manos de los Hispanos durante cuatro años (ganaron las ediciones de 2018 y 2020). Además, con Jordi Rivera, España ha conquistado otros tantos metales, sumando la plata continental en 2022, un bronce en el Mundial de Egipto en 2021 y Suecia 2023, y el Bronce Olímpico de Tokyo.
Juan Carlos Pastor, el profesor que encontró la fórmula del éxito
El entrenador vallisoletano Juan Carlos Pastor tiene el honor de ser el entrenador español que inauguró la vitrina de la selección nacional en trofeos internacionales. Pastor consiguió el primer mundial de la historia del balonmano español tras ganar el campeonato mundial de Túnez en 2005.
Actualmente es el seleccionador de Egipto, un país que se ha convertido en uno de los equipos más competitivos desde 2019 en adelante. Para ello, la federación egipcia buscó contar con un técnico de primer nivel mundial. Bajo el mandato de Pastor, Egipto ha ganado el campeonato africano de balonmano en 2023 y se ha clasificado para los Juegos Olímpicos de París, donde espera superar el 4º puesto conseguido en Tokyo.
Antonio Carlos Ortega, el pluriempleado con el gen ganador
El actual entrenador del Barça y actual campeón de Europa con el equipo blaugrana, también es a su vez el entrenador de Japón. Los asiáticos se han metido en unos Juegos Olímpicos por primera vez desde 1988, ya que en la anterior edición de Tokyo2020, fueron invitados por su condición de anfitriones.
Ortega ha conseguido traspasar su gen competitivo y su estilo de juego frenético a una selección de un perfil bajo a nivel internacional. Los nipones han pasado de ser goleados en los últimos campeonatos a plantar cara a trasatlánticos como España, Alemania o Croacia.
Chema Rodríguez, en busca de convertirse en entrenador leyenda
José María Rodríguez es toda una institución dentro del balonmano español. Lo fue todo como jugador, y aspira a ser otra leyenda como entrenador.
El ex jugador es el entrenador de la selección de Hungría desde 2022. El palentino quiere volver a colocar a los húngaros como una potencia balonmanística en Europa del Este y en el Mundo. Buscando el prestigio perdido, Rodríguez ha conseguido mejorar el puesto de la selección en el Europeo de 2022, donde fueron decimoquintos, hasta colocarlo como el quinto mejor equipo de Europa en el anterior certamen. Además, ha conseguido clasificar a los magiares para unos Juegos Olímpicos por primera vez desde Londres 2012. En las dos anteriores ediciones Hungría no había clasificado (2016 y 2020). Ha quedao encuadrado en un grupo complicado, en el que ha competido contra Noruega, ganado a Argentina y en el que puede dar la puntilla a Francia en sus Juegos.
Otros entrenadores repartidos por el mundo
Además, Valero Rivera en Qatar (selección a la que llevó de la nada a la Plata Mundial en 2015), Toni Gerona en Serbia, Xavi Pascual en Rumania y Aitor Etxaburu en Chile completan la terna de entrenadores españoles repartidos por el mundo en otras selecciones.