Vettel consigue la victoria en Baréin por delante de Hamilton con abandonos de Sainz y de Alonso
Sebastian Vettel ha logrado su segunda victoria del Mundial tras hacerse con el triunfo en el GP de Baréin. El alemán, en una lección de pilotaje e inteligencia, se impuso a Hamilton y a Bottas, que se mostró muy lento en Sakhir. Sainz abandonó por un toque con Stroll y Alonso se retiró, otra vez, por rotura de motor.
Qué ganas tiene Sebastian Vettel de cambiar 'tetra' por 'penta'. Por tener su quinto Mundial de F1 y por sumar el primero con Ferrari. De momento, tanto él como la 'Scuderia' van por buen camino. El alemán ha logrado la victoria en el GP de Baréin tras hacer un carrerón y poder imponerse así a los dos Mercedes de Lewis Hamilton y de Valtteri Bottas, que a pesar de hacer la pole terminó tercero. McLaren-Honda, por su parte, no se cansa de hacer el ridículo este año y al abandono antes de empezar de Vandoorne se sumó el de Alonso por, sí, una rotura de motor según la radio de Fernando.
Se las prometía muy felices Bottas, a pesar de que en las últimas ocho carreras en Sakhir solo hubo dos vencedores saliendo desde la pole. Pero con el Mercedes, con el super Mercedes, las estadísticas cuentan de poco. Sin embargo, de nuevo contaron, y es que el finlandés se comportó cual tortuga con los neumáticos superblandos. Lo peor, para su equipo, es que no frenó a los rivales, sino que a quien realmente frenó más fue a Lewis Hamilton.
Porque Vettel fue, de nuevo, más listo. Sebastian se comió al británico en la primera frenada para empezar a presionar a un Bottas horrible que no tuvo el día. Que fue regular y estable pero en los tiempos bajos y que, al final, perdió hasta diez segundos con Hamilton en apenas cuatro vueltas. Valtteri mantuvo eso sí detrás al Ferrari al comienzo cuanto pudo, pero todo cambió en su primera parada y unas vueltas de locura con hasta cuatro abandonos consecutivos.
El tetracampeón paró primero, y con el safety car tras el toque de Stroll con Sainz a la salida de Carlos de boxes que acabó con ambos fuera, ya lideraba. Cuando el coche de seguridad se marchó, empezó a tirar mientras Bottas sufría y sufría. Tal fue así que el finlandés llegó a pedir a su equipo que dejaran pasar a Hamilton. Ya era tarde, Lewis incluso tenía consigo una penalización de cinco segundos. Eso sí, el de Mercedes no dejó de luchar y buscó apurar sus opciones al final, presionando a Vettel desde la distancia.
McLaren-Honda vuelve a dejar solo a Alonso
Pero la experiencia es un grado a favor, sin duda. Y de eso sabe mucho Seb. Como también sabe mucho de eso Fernando Alonso. Con un MCL32 lastrado por la escasa potencia que tienen de por sí, y con la menor potencia que tenían en carrera tras sus problemas de motor de la clasificación, el asturiano dio la talla. La dio en las curvas eso sí, pues en recta era y es imposible y sucumbió ante Renault y Toro Rosso. Pero cuando había que poner manos y habilidad, el bicampeón mostraba ser claramente uno de los mejores pilotos sobre el asfalto.
Con inteligencia y buen hacer, dejó grandes adelantadas a Ocon y a Palmer, y dio batalla a todos cuantos se acercaban y querían medirse ante él en frenada y en trazada. Sin embargo, y por tercera vez consecutiva, Alonso no pudo cruzar la bandera a cuadros. Motor roto, otro motor roto, y McLaren-Honda de nuevo haciendo el ridículo en una prueba más. Vandoorne, de hecho, ni siquiera tomó la salida por una fuga de agua.
Vettel, líder en solitario tras tres carreras
Tras dos carreras seguidas, la F1 parará un fin de semana para volver en Rusia con la prueba de Sochi. Mercedes, quién lo iba a decir, rema a contracorriente ante un Sebastian Vettel que se ha adaptado a la perfección a su nuevo Ferrari y a estos nuevos monoplazas. Seb es líder del Mundial, aventajando en siete puntos a Lewis Hamilton. Hay Mundial, y por fin, tras varias temporadas, hay dos escuderías diferentes pujando por él.