Fernando Alonso podría no tener ni tan siquiera opción de competir en las 500 Millas de Indianápolis. El asturiano no se aseguro una de las 30 plazas directas en la clasificación del sábado y tiene que acudir a la repesca, en la que se dirimirán los siguientes participantes.
"Ha sido un día difícil, y sigue una semana difícil. Estuvimos corriendo muy bien por la mañana cuando las condiciones no fueron tan malas, pero desafortunadamente tuvimos un pinchazo trasero y luego decidimos esperar hasta esta tarde para regresar cuando las condiciones de la pista fueran ligeramente mejores", explicó Alonso tras la prueba.
Así, reconoció que no tuvieron "el ritmo" esperado. "Debemos intentarlo de nuevo y tendremos que hacer las cuatro vueltas de la mejor posible, limpias y sin errores. Es un momento difícil para el equipo, pero debemos mantener la calma y la concentración, y espero que podamos encontrar lo suficiente para estar en una de tres primeras posiciones de entre las seis", continuó.
Y es que el ovetense deberá disputar en el 'Bump Day' el 'Last Row Shootout', donde los seis monoplazas con peores promedios se medirán por los tres últimos puestos para la carrera, desde donde saldrán en la cola de la parrilla. A su vez, los nueve coches mejor clasificados se enfrentarán en el 'Fast 9', donde se establecerá la pole y el orden de las tres primeras filas de salida.