El español Fernando Alonso (McLaren Honda), ante la próxima cita del mundial de Fórmula Uno, que será este fin de semana en el Gran Premio de Malasia, aseguró que será "más difícil" ya que las rectas requieren "buena velocidad punta y potencia".
"En esta pista se mezclan un montón de características distintas, por lo que a ver lo que podemos recuperar en las curvas lentas. Los coches de 2018 serán, sin duda, más rápidos, así que la experiencia será divertida y espero que podamos evitar cualquier drama y tener una carrera sólida", explicó Alonso en un comunicado de McLaren.
El asturiano se mostró con "ganas" de volver a subirse al coche tras su abandono en el Gran Premio de Singapur en la novena vuelta por pérdida de potencia del motor de su monoplaza, después de recibir un golpe en la salida del holandés Max Verstappen.
"Lo que pasó en Singapur fue decepcionante"
"Lo que pasó fue decepcionante y es difícil esconder tu frustración cuando eres víctima del accidente de otro. Sentí que teníamos potencial para ser realmente competitivos y es una lástima que no pudiéramos sumar puntos para probarlo, pero estas cosas pasan", resaltó.
El bicampeón del mundo afirmó que las condiciones en Malasia serán "muy similares" a las de Singapur con "calor y humedad desafiantes" tanto para los pilotos como los monoplazas. "La configuración no nos será tan favorable, pero por supuesto que seguiremos peleando por conseguirlo todo. Quedan seis carreras y todavía estamos poniendo toda nuestra energía en terminar cada prueba en la mejor posición posible", señaló.