La primera prueba sprint de la temporada en el Mundial de Fórmula 1 ha comenzado con polémica. Pérez se impuso a Leclerc tras un inicio accidentado en el que tuvo que intervenir el Safety Car tras un accidente de Tsunoda, pero la polémica vino justo por detrás, cuando Max Verstappen y George Russell luchaban por la tercera posición.
El piloto de Mercedes sorprendió al líder del Mundial con una gran salida y le arrebató la tercera plaza en las primeras curvas con un adelantamiento apretadísimo en el que ambos monoplazas llegaron a tocarse y el piloto de Red Bull estuvo a punto de chocar con el muro.
Tras el adelantamiento, el coche de Max Verstappen quedó dañado, pero eso no le impidió arrebatar la tercera plaza al británico tras la reanudación de la carrera y terminar en el podio.
A pesar de todo, el neerlandés se quejó a su equipo por radio de que Russell no le había dejado espacio y así se lo hizo saber al piloto de Mercedes al terminar la carrera, cuando se acercó a él para recriminarle lo ocurrido.
El británico le dijo que no tenía suficiente grip, a lo que Verstappen contestó que nadie lo tenía (por ser el inicio de la carrera) y que tenía que haberle dejado espacio. "Espera lo mismo la próxima vez", terminó diciéndole el piloto de Red Bull al de Mercedes.
Al término de la carrera, Verstappen ha criticado la actitud del británico diciendo que "es muy bueno creando excusas". Russell, por su parte, ha explicado que estaba "sorprendido" porque tenía el interior y que había sido Verstappen quien había perdido la posición.