Qué caras de alegría se habrían dibujado en McLaren si el GP de Mónaco hubiera tenido 41 vueltas. Qué bien habría sido, para la moral del equipo, tener a Button y a Alonso en los puntos en una prueba tan mítica como esta y puntuar por primera vez en 2015. Pero no, el GP de Mónaco no tiene 41 vueltas, tiene 78. Y entre Rosberg, que cruzó el primero la bandera a cuadros, y Stevens, el último, no estaba Fernando. No estaba porque volvió a abandonar, porque, otra vez, no pudo terminar todas las vueltas de una prueba de Fórmula 1.
Y ya van tres. Tres de cinco intentos, pues en Australia el asturiano ni estaba en pista. Porque, como se suele decir, lo que mal empieza tiene visos de no terminar bien. Fuera de Q3, por un problema mecánico, cuando podía haber entrado en Q3. Y fuera de los puntos en carrera cuando rodaba en ellos. Cuando todo indicaba que iba a estar en ellos. Cuando, tras un arranque complicado por una inquietante e incomprensible sanción por un toque con Hulkenberg cuando el bicampeón tenía el interior y la posición ganada.
Aún con los cinco segundos de 'stop and go'. Aún con esa carga, Alonso estaba en puntos en una pista como Mónaco. Noveno era cuando pasó por el 'pit lane', noveno seguía siendo cuando salió. Con neumático superblando, con una estrategia diferente a la de Button y con muchas vueltas para alcanzar su posición. Pero no, no fue así. No sólo no llegó a él sino que se fue andando del circuito. Esta vez fue un problema en la caja de cambios el que detuvo en seco su McLaren-Honda, un McLaren-Honda que sí sumó cuatro puntos gracias a Jenson.
... Y Hamilton le da el triunfo a Rosberg
No estuvo Alonso en el el tremendo final de Mónaco. En el espectacular final de Mónaco. Sí, es un trenecito de coches, uno en el que a veces, hay toques. Toques como el de Verstappen y de Grosjean, que hizo volar a Max en un accidente brutal que hizo salir al 'safety car', y que provocó que Lewis Hamilton, que mandaba con puño de hierro la prueba, se quedara sin sumar los 25 puntos y sin refrendar el domingo la pole del sábado.
Todo por un absurdo. Por una decisión incomprensible de las mentes pensantes de Mercedes y del propio Lewis al entrar en boxes al cambiar neumáticos, cuando no era ni mucho menos necesario, y cuando ni Rosberg ni Vettel hicieron lo mismo. A su regreso a pista, ambos estaban por delante de él. Por delante de él en Mónaco, en una carrera como Mónaco, en la que es casi imposible adelantar. Ni tener gomas nuevas hizo que Hamilton pudiera no sólo llegar a Nico sino el hecho de pasar al Ferrari de Seb.
Menudo regalo le brindó el bicampeón a Rosberg. Menudo presente que recibió Nico, un Nico a buen seguro sonriente por tener ante él una victoria que ni él mismo pensó que iba a tener a falta de diez vueltas. Una victoria que supone la tercera consecutiva para Rosberg, que hace que el alemán iguale en Montecarlo en cuanto a triunfos seguidos a toda una leyenda como es Ayrton Senna. Y una que hace que la diferencia de puntos en el Mundial, la enorme diferencia que había entre él y Hamilton antes de Barcelona, se quede en diez puntos con todo un campeonato por correr.
Sainz y Merhi, alegría española
Un puntito sumó Carlos Sainz. Sí, salía desde el 'pit lane'. En un circuito como Montecarlo, con un asfalto estrecho en el que toda remontada es una quimera. Pero para Carlos no lo fue, porque Carlos tenía ritmo en clasificación y también lo tuvo en carrera. El español, con la estrategia del 'pico y pala' fue poco a poco escalando plazas hasta llegar al décimo puesto aprovechando el abandono de Verstappen y de Grosjean.
Buenas noticias para él, y también para Roberto Merhi, que pudo no sólo acabar en Mónaco sino también hacerlo por delante de su compañero Will Stevens en Manor. Queda pues celebrar los triunfos personales de aquellos que ganaron o que sienten que lo hicieron y que los que ahora lo ven todo lleno de nubes despejen su mente de cara a Canadá. Fernando Alonso es uno de esos hombres, pero el nombre del que peor lo verá todo ahora es el de Lewis Hamilton. Menudo regalito que le hizo a Rosberg en Montecarlo...