El Ferrari de Charles Leclerc volvió a ser el más rápido en el GP de Australia de Fórmula 1 en una carrera marcada por los abandonos de sus principales perseguidores en el campeonato, Max Verstappen y Carlos Sainz. El neerlandés rompió el motor a falta de 19 vueltas, mientras que el español quedó atrapado en la grava tras hacer un trompo.
El Red Bull de Checo Pérez fue segundo, aunque terminó a 20 segundos del líder. George Russell devolvió a Mercedes al podio después de un último GP en Arabia Saudí en el que dejaron mucho que desear. Hamilton fue cuarto justo por delante de los Mclaren de Norris y Ricciardo.
Este GP deja a Leclerc aún más líder del Mundial. El monegasco aventaja ya en 34 puntos a Russell, segundo, y en 38 a Carlos Sainz, tercero. El actual campeón del mundo, Max Verstappen, sumó su segundo cero de la temporada y se aleja ya a 46 puntos de la cabeza.
Fin de semana negro para Sainz y Alonso
Los dos españoles brillaron el viernes en los entrenamientos libres y se esperaba que pudieran estar arriba, pero los problemas del sábado y el domingo convirtieron la vuelta a Australia en un fin de semana negro.
Fernando Alonso se fue al muro en la Q3 del sábado cuando rodaba muy rápido en busca de un puesto cerca de la cabeza. Ese mismo accidente arrastró a Sainz, que también rodaba rapidísimo en ese momento, pero la bandera roja provocada por el accidente del asturiano anuló su vuelta. En la reanudación el Ferrari de Sainz tuvo problemas y no pudo mejorar su tiempo. Salieron noveno y décimo.
El domingo no comenzó mejor para el piloto madrileño, al que tuvieron que cambiar el volante de salir. En la salida no funcionaron las levas y el sistema de anticalado le hizo perder varias posiciones. En la tercera vuelta hizo un trompo tras pisar la hierba y tuvo que abandonar tras quedar atrapado en la grava.
Fernando Alonso volvió a acusar problemas de estrategia de equipo. El asturiano estaba realizando una buena carrera, pero no entró a cambiar neumáticos durante el Safety Car del accidente de Vettel. Rodaba cuarto entonces. El reagrupamiento no le vino nada bien al piloto de Alpine, que tuvo que hacer dos paradas durante la segunda mitad de la carrera. Terminó último.
