Marc Márquez ha conseguido la victoria en el Gran Premio de Francia de MotoGP. Y lo ha hecho de una manera que parece fácil para los espectadores, controlando la carrera en las primeras vueltas y luego una vez calentado los neumáticos, marcar un ritmo inalcanzable para sus rivales. En cinco carreras ha logrado un segundo puesto y tres victorias. De no ser por el error en Austin, un circuito en el que hasta este año tenía un pleno de victorias, la ventaja sería ya considerable y habría dejado el mundial muy complicado para sus rivales.
Después del Gran Premio de Francia, el piloto del equipo Repsol Honda ha igualado las 55 poles de Valentino Rossi y las 47 victorias de Jorge Lorenzo en la máxima categoría. Con tan solo 26 años suma un total de 73 victorias y está ya a 13 de las 90 de Ángel Nieto. Al talento del piloto de Cervera le añadimos una Honda que ha mejorado claramente en cuanto a las prestaciones del motor y le permite tener más confianza con la rueda delantera, pudiendo utilizar un neumático más blando, por lo que le hace todavía un rival más difícil de batir.
En estos momentos, creo que nadie duda que el binomio Honda-Márquez es insuperable y que si no ocurre nada extraño, puede dejar muy pronto el campeonato sentenciado. En estos momentos Ducati y Dovizioso no están al nivel del actual líder, Yamaha no está al nivel de Honda y Suzuki ha dado un gran paso adelante pero todavía insuficiente.
Nadie duda de que este Mundial de MotoGP solo lo puede perder el propioMarc Márquez y teniendo en cuenta que cada carrera que pasa es un piloto más maduro, la lucha a partir de muy pronto será por quien consigue el segundo puesto de la clasificación general.