Manolo Plaza y su hija Mónica tuvieron un enorme susto en el Rally Dakar que acaba de terminar. El padre, que iba al volante, junto a Mónica que hacía las labores de copiloto, no pudieron esquivar a un motorista francés que se cruzó en su trayectoria. Los pilotos de motos sufren las condiciones extremas del desierto y fruto de la desorientación y el cansancio, el herido se cruzó en el camino del coche de los españoles.
El piloto herido fuera de peligro
Por suerte los servicios médicos pudieron llegar a tiempo y atender las diversas lesiones del motorista, que ahora mismo se encuentra fuera de peligro como confirma David Alonso en la Brújula del Deporte. Tremendo susto ya que afirma Manolo que tras el impactó "llegué a pensar que estaba muerto"