Una niña de seis años falleció en Orem (Utah) después de recibir un pelotazo de su padre, que estaba jugando al golf. La pequeña se encontraba a pocos metros y la bola le golpeó a la altura del cuello a una velocidad muy alta.
Todo ocurrió cuando el hombre falló el golpe y la bola impactó en la base de la cabeza de la pequeña, que solía acompañar a su padre a jugar al golf.
La niña fue trasladada al hospital, donde perdió la vida después de los intentos fallidos de los médicos por reanimar a la pequeña.