Otra vez en Portugal y de nuevo frente al conjunto anfitrión en la final el historial de la roja de fútbol sala femenino se agranda. Segunda corona seguida para España, dominadora de esta competición que culminó su segunda edición en un último partido plagado de alternativas, emoción y resuelto desde los tiros de seis metros.
Nada que ver tuvo esta con la edición pasada donde España arrolló a su rival para apuntarse el título continental. En esta ocasión y a pesar de que el conjunto de Claudia Pons llegó al duelo decisivo con nueve victorias en su haber, fue maniatada por el equipo local que dio la sensación de tener perfectamente estudiado al campeón.
El partido tuvo diez minutos extra para determinar al campeón y España acarició el título. Portugal desperdició tres penaltis-córner y el conjunto de Pons culminó la remontada en el 44 en un saque de esquina de Ana Luján que llegó a María Sanz para llevar la pelota a la red por tercera vez.
A la desesperada evitó la derrota Portugal. Con portero jugador en el tramo final igualó a un minuto del final por medio de Pisko que llevó el desenlace a los penaltis. España estuvo impecable. Marcó los cinco que lanzó. Silvia detuvo dos, a Ana Azevedo y Ana Pires que resultaron definitivos.