Bautista y Alcaraz confirmaron sobre la pista el favoritismo con el que España, invicta en casa desde 1999, afrontaba esta eliminatoria. Ambos solventaron sus dos partidos con autoridad ante Gabi Adrian Boitan y Marius Copil, este la primera víctima en la Davis del joven pupilo de Juan Carlos Ferrero, que tuvo el mejor de los estrenos.
El Club Tenis Puente Romano de Marbella (Málaga) es el escenario de esta eliminatoria que permite a España encarrilar su victoria sin ceder sets y en dos horas y 41 minutos. El triunfo definitiva está ahora en manos del doble formado por Alejandro Davidovich y Pedro Martínez el cerrar el cruce este sábado ante Horia Tecau y Nicolae Frunza.
Bautista ejerce de número 1
Bautista fue el encargado de ejercer de número uno y de dar el primer punto tras imponerse con mucha autoridad a un inexperto Gabi Adrian Boitan en dos sets por 6-3, 6-1. El de Castellón no tuvo excesivos problemas, salvo al inicio del duelo, para quebrar la resistencia del jugador rumano, 721 del ranking mundial de la ATP y sin apenas experiencia, que se fue deshaciendo poco a poco ante la solidez mostrada por su rival.
Sin embargo, la Copa Davis siempre da oportunidades a los teóricos jugadores inferiores y a eso se agarró Boitan, que empezó con más seguridad sobre la pista y arriesgando más en sus golpes, sobre todo con la derecha. Bautista, en cambio, tardó algo más en carburar, pero el 'break' en blanco que logró en el quinto juego terminó por asentarle, pese a que aún tuvo que salvar un amenazante 15-40 en el siguiente juego.
A partir de ahí, el número 15 del mundo, que apenas cometió errores no forzados, se mostró muy superior y cerró, con otra rotura, el primer set. Otro 'break' nada más iniciarse la segunda manga acabó con la resistencia del rumano, que dejó vía libre al español para sumar el primer punto.
Alcaraz se estrena con victoria
Después llegaba uno de los momentos que más expectación levantaba en la localidad malagueña. El 'fenómeno Alcaraz' se estrenaba por fin en la Copa Davis tras no haberlo podido hacer en las últimas Finales de Madrid por culpa del coronavirus y el tenista de 18 años no fue presa de los nervios, salvo en los momentos finales.
El murciano tuvo algo más de trabajo que Bautista, aunque enfrente tenía a un rival más hecho como Marius Copil, que pese a ser el 261 en la ATP, acumulaba más experiencia en la Copa Davis. Pero pese a la resistencia del rumano, el español sacó el duelo en dos sets también por 6-4, 6-3 y mostrando varias de sus virtudes, sobre todo sus piernas y su poderoso 'drive' (17 ganadores).
Alcaraz dio la sensación de tener controlado siempre el partido, pero su rival tuvo paciencia y no se descompuso para mantener las cosas igualadas, sobre todo en el primer set, que no se decidió a favor del español hasta el final. Ninguno dio concesiones al servicio hasta el décimo juego, cuando el rumano las ofreció y el 19 del mundo no lo desaprovechó para cerrarlo.
Y como sucediera en el primer punto, esa ventaja amplió la confianza de uno y mermó la de otro. Copil no pudo jugar al mismo nivel, mientras que Alcaraz no aflojó para romper en el cuarto juego y ya coger una buena ventaja (4-1). Ahí, se frenó y tras desaprovechar un 0-40 para ponerse 5-1 y servicio, las prisas hicieron acto de aparición y le costó finiquitar la contienda, teniendo que levantar con 5-3 dos bolas de rotura antes de poner fin a la emoción.