Serena Williams fue multada con 17.000 dólares por los organizadores del Abierto de EEUU por cometer tres violaciones del código de conducta durante el segundo set de la final femenina que perdió frente a la japonesa Naomi Osaka por 6-2 y 6-4.
Williams fue sancionada en el segundo set por el juez de silla, el portugués Carlos Ramos, por recibir ayuda desde el palco de su entrenador, Patrick Mouratoglou, romper la raqueta contra el suelo y abuso verbal al acusarlo de "ladrón".
Las acciones de Williams, que en la rueda de prensa posterior al partido dijo que las sanciones fueron "sexistas", eclipsaron el triunfo de Osaka, de 20 años, que se convirtió en la primera tenista japonesa que gana el Abierto de Estados Unidos y un torneo del Grand Slam.
Williams, de 36 años, que disputó su decimocuarta final del Abierto de Estados Unidos, no pudo lograr su séptimo título en el último torneo de Grand Slam de la temporada y el vigésimo cuarto de su carrera profesional, lo que le hubiese permitido empatar con la legendaria australiana Margaret Court, que tiene la mejor marca. La estadounidense recibió un premio de 1.850.000 dólares por haber jugado la final.