El expresidente catalán y eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont, desvelará este jueves desde Francia si será o no el candidato de este partido a las elecciones autonómicas que se celebrarán el próximo 12 de mayo.
A inicios de esta semana, Puigdemont publicó en sus redes sociales un cartel anunciando que hoy a las 19.00 horas dará una rueda de prensa en el Ayuntamiento de la localidad francesa de Elna en la que anunciará si será o no el candidato de Junts a los comicios catalanes.
"Compromiso político"
Junto a ese cartel, el también eurodiputado de Junts escribió que "el hilo rojo" que ha marcado su compromiso político se ha mantenido "indeleble" pese a las "adversidades" a las que se ha tenido que enfrentar desde hace ocho años, "especialmente duras" desde hace "seis años y medio".
"Fuimos al exilio por las mismas razones por las cuales tendremos que volver: el futuro de nuestra nación y no nuestro futuro personal ha inspirado todas las decisiones tomadas y así tiene que continuar siendo hasta el final", señaló el expresidente catalán, quien concluyó con la frase en latín "in spe, contra spem" ('en la esperanza, contra la esperanza').
Tras esta convocatoria, distintos miembros del partido utilizaron sus redes sociales para poner mensajes como "preparados" y "nos vemos en Elna", confirmando así su asistencia. Entre ellos la presidenta del partido, el secretario general y la portavoz en el Congreso, Laura Borràs, Jordi Turull y Miriam Nogueras, respectivamente.
Además, esta rueda de prensa tendrá lugar dos días después de que el Partido Popular anunciara el martes en la Cámara Alta que hará uso de su mayoría absoluta en el Senado para plantear un conflicto de atribuciones contra el Congreso de los Diputados por considerar que la ley es "una reforma encubierta" de la Constitución y no se ha tramitado como tal.
Hasta la fecha, Puigdemont no se pronunció al respecto de esta decisión, pero Nogueras deploró que la "única obsesión" del PP es "impedir que se aplique la amnistía" y que los independentistas puedan seguir haciendo su trabajo "de forma normal". Al mismo tiempo, acusó a los populares de "filibusterismo".
