El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se están volcando en la campaña de las elecciones catalanas del 12 de mayo, a la que han trasladado su pulso político y en la que el candidato del PSC, Salvador Illa, centra el debate sobre pactos poselectorales.
La omnipresencia de Sánchez y Feijóo en la campaña catalana, muy superior a la de anteriores citas electorales, pone de manifiesto la relevancia que socialistas y populares conceden a los comicios del 12M, por todo lo que está en juego -el resultado en Cataluña puede condicionar directamente la gobernabilidad en España- y por ser el preludio de las elecciones europeas del 9 de junio.
La planificación inicial del PSC preveía la participación de Sánchez en cuatro actos en la primera mitad de la campaña, pero los planes quedaron abruptamente alterados cuando el presidente del Gobierno abrió un periodo de reflexión de cinco días, en el que suspendió su agenda y que terminó el pasado lunes, al anunciar su decisión de continuar en el cargo.
A partir de ese momento, Sánchez se activó en apoyo a Illa: el presidente del Gobierno llegó a Barcelona la noche del martes, el miércoles 1 de mayo irrumpió por sorpresa en la Feria de Abril de la capital catalana acompañado del candidato del PSC, al día siguiente protagonizó junto a él un mitin en Sant Boi de Llobregat (Barcelona) y este sábado compartirán otro acto en Montmeló (Barcelona).
También Feijóo ha multiplicado su presencia en Cataluña: está previsto que participe en actos repartidos en ocho días durante la campaña, una implicación muy por encima de lo que habitualmente sucedía con los líderes nacionales del PP en anteriores convocatorias electorales catalanas.
Feijóo ha visitado este viernes por la mañana Figueres (Girona), donde ha anunciado que Dolors Montserrat repetirá como candidata del PP a las elecciones europeas, y Mataró (Barcelona), donde ha arropado a su candidato, Alejandro Fernández. Este sábado estará en otro acto en Badalona (Barcelona).
La campaña catalana está sirviendo también como campo de batalla entre PSOE y PP: Feijóo acusó a Sánchez, el fin de semana pasado en Ulldecona (Tarragona), de mostrar un "tic autoritario" inédito desde tiempos de Franco, mientras que el presidente del Gobierno llamó a derrotar al "fango" de PP y Vox en las urnas.
No solo los líderes de PSOE y PP se están volcando en la campaña del 12M: el presidente de Vox, Santiago Abascal, tiene previsto participar en un total de diez actos electorales -uno de ellos este viernes en Lleida-, mientras que la vicepresidenta del Gobierno y líder de Sumar, Yolanda Díaz, acompañará a la candidata de Comuns Sumar, Jéssica Albiach, este domingo en Tarragona.
Illa ya descarta un pacto con JxCat
Un día después de haber apostado por liderar un Govern "transversal" del que no excluía a JxCat, Illa ha descartado este viernes un entendimiento con los de Carles Puigdemont y ha asegurado que "con JxCat no habrá pacto" porque sus lógicas de gobierno son "incompatibles": "Ellos apuestan por el bloqueo, Puigdemont es bloqueo y es década perdida".
Puigdemont, por su lado, ha reclamado un frente común de partidos independentistas en el Congreso para revertir la "deuda histórica" del "déficit fiscal" del Estado hacia Cataluña, que ha cifrado en 450.000 millones de euros desde 1986.
El presidente de la Generalitat y candidato de ERC a la reelección, Pere Aragonès, ha evitado señalar con quién prefiere pactar tras el 12M, con la premisa de "menos hablar de sillas y más de propuestas", y ha retado al PSOE a apoyar una proposición no de ley presentada por los republicanos en el Congreso "sobre la lucha contra la corrupción, las cloacas del Estado y la guerra judicial".
