Estados Unidos celebra este martes las elecciones presidenciales que se celebrarán el próximo mes de noviembre. En cada contienda electoral americana, el término swing states o estados bisagra se convierte en un tema de discusión recurrente.
Muchos de los estados americanos tienen una tendencia clara, bien sea a votar a los demócratas bien a los republicanos en las elecciones; sin embargo, en lugar de seguir una tendencia predecible, los swing states cambian de lealtades de una elección a otra, lo que los convierte en el foco de atención de los candidatos y los estrategas de campaña, ya que, muchas veces, son determinantes para ganar las elecciones. Comprender qué son los “swing states”, por qué son tan importantes y cómo influyen en el sistema electoral de Estados Unidos es clave para seguir de cerca las elecciones en este país.
El sistema de elección presidencial
Para entender la importancia de los “swing states”, primero hay que comprender el sistema del Colegio Electoral, que es la forma en que Estados Unidos elige a su presidente. A diferencia de muchos países donde el ganador de las elecciones es quien obtiene más votos directos a nivel nacional, en Estados Unidos el presidente es elegido por electores designados por los estados. Cada estado tiene un número específico de electores, basado en su población, y el candidato que obtiene la mayoría de los votos en un estado gana todos los votos electorales de ese estado, un sistema conocido como “el ganador se lleva todo”.
Actualmente, el Colegio Electoral cuenta con un total de 538 electores, y el candidato presidencial necesita al menos 270 votos electorales para ganar. Esto significa que, en lugar de centrarse en obtener el mayor número de votos a nivel nacional, los candidatos se enfocan en ganar en estados clave que les permitan alcanzar esos 270 votos.
El papel de los swing states
Un “swing state” es un estado donde el apoyo a los dos partidos principales, Demócrata y Republicano, está relativamente equilibrado, lo que significa que puede decantarse hacia cualquiera de los dos candidatos en una elección. A diferencia de los “estados seguros”, donde uno de los partidos tiene una ventaja clara (por ejemplo, California tiende a votar por los Demócratas y Texas por los Republicanos), los “swing states” tienen un historial más variable y menos predecible.
En un “swing state”, los márgenes de victoria suelen ser pequeños y, por lo tanto, cada voto cuenta. Esto hace que los candidatos dediquen una gran parte de su tiempo y recursos a hacer campaña en estos estados, ya que ganar allí puede marcar la diferencia en una elección reñida. El comportamiento electoral de los “swing states” puede depender de varios factores, como cambios demográficos, circunstancias económicas, cuestiones sociales clave y el carisma o la estrategia de los candidatos.
Los “swing states” para las elecciones de 2024
Las diferentes encuestas indican que los estados más disputados en estas elecciones serán Nevada, Arizona, Wisconsin, Michigan, Pensilvania, Carolina del Norte y Georgia. La mayoría de los sondeos dan una ligera ventaja a Harris en estos estados, excepto en Carolina del Norte, pero su comportamiento cambia de manera sustancial en cada ciclo electoral. En 2020, por ejemplo, todos estos estados acabaron sumando electores para Trump, excepto Nevada, mientras en las últimas elecciones todos lo hicieron para Biden, exceptuando Carolina del Norte.
Pensilvania con 19 electores y Carolina del Norte y Michigan con 16 y 15 electores respectivamente son los que más peso tienen en la contienda.
La importancia de los “swing states” es cada vez mayor en las elecciones americanas, ya que los cambios demográficos y socioeconómicos están haciendo que cada vez más estados rompan con su tradición de voto. Así, las deslocalizaciones industriales o el aumento de votantes entre minorías demográficas, adquiere cada vez más relevancia para el resultado final, lo que modela las campañas e interés de los candidatos por ganar votos en los estados clave.
Este mapa de Cook Political Report nos da una idea gráfica de los estados en disputa para las estas elecciones de 2024: