El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha llegado al mitin del PSOE que se celebra este miércoles en Benalmádena (Málaga) junto a su mujer, Begoña Gómez, al día siguiente de que el juez decidiese llamarla a declarar como investigada por un presunto delito de corrupción y tráfico de influencias.
Gómez, que hasta el momento no había acompañado a Sánchez en ningún mitin durante esta campaña de elecciones europeas está sentada en primera fila junto al líder del PSOE y el resto de la plana mayor del partido: la vicepresidenta del Gobierno y vicesecretaria general, María Jesús Montero, el secretario de Organización, Santos Cerdán, y el líder de los socialistas andaluces, Juan Espadas.
Espadas, que ha sido el primero en tomar la palabra apoyando la candidatura de Teresa Ribera, ha agradecido la presencia de Sánchez y también de Begoña Gómez, sentada a su lado, momento en el que los asistentes han coreado 'Begoña, Begoña', entre vítores y aplausos.
Gómez, que también es militante socialista, ha acudido a este acto por sorpresa, al día siguiente de que se hiciese público que deberá acudir al juzgado a declarar el próximo 5 de julio.
Tras esta decisión del juez, Sánchez dirigió una nueva carta a la ciudadanía en la que advertía un intento de influir en el resultado electoral y tachaba de "zafio montaje" las acusaciones contra su mujer.
El presidente del Gobierno ha agradecido en el acto la "solidaridad", "empatía" y "compañerismo" de los socialistas en los últimos meses, en los que asegura que ha "arreciado muy duramente" los "ataques de la internacional ultraderechista" contra él y su familia.
"Os pido que el próximo domingo toda la gente de izquierda, progresista, europeísta, vaya en masa a votar al PSOE, para que gane la política sana, los avances sociales, y sea derrotada la política sucia, los recortes y la agenda reaccionaria de Feijóo y Abascal, de esa internacional ultraderechista", ha dicho Sánchez.