El presidente catalán, Pere Aragonès, y JxCat se han emplazado este miércoles a explorar un "frente común" para poner condiciones a la investidura de Pedro Sánchez.
En la sesión de control al presidente catalán en el pleno del Parlament, Aragonès ha destacado que en las elecciones generales del 23J "Cataluña ha parado a la derecha y la extrema derecha" y, aunque ha admitido que los resultados del independentismo "son malos", ha puesto de relieve que se abre una "oportunidad" para condicionar la investidura y conseguir avances hacia una solución al conflicto.
Según Aragonès, "vienen semanas de trabajo, negociación y coraje", en las que corresponderá al candidato socialista a la investidura, Pedro Sánchez, "hacer propuestas" a los partidos que pueden darle su apoyo, por lo que, según el presidente catalán, ERC y JxCat deben "trabajar conjuntamente" para que sus 14 diputados en el Congreso "aprovechen" esta oportunidad en beneficio de Cataluña.
Aragonès ha apostado por "abordar con calma y discreción" la carpeta catalana, "con toda la exigencia mutua necesaria", para poder "acabar con la represión y abrir caminos basados en el ejercicio de la democracia", en alusión a las reivindicaciones independentistas de "amnistía y autodeterminación".
Esta oportunidad que ofrece la aritmética parlamentaria "la aprovecharemos mucho más si todos los independentistas actuamos conjuntamente", ha remarcado.
"JxCat no rehuirá esta oportunidad para desbloquear el conflicto"
El presidente del grupo de JxCat en el Parlament, Albert Batet, ha dicho que su partido "no rehuirá esta oportunidad para desbloquear el conflicto político entre el Estado español y Cataluña", aunque esperará "a ver si al otro lado quieren abrir una negociación política", algo que "únicamente depende de Pedro Sánchez".
Tras advertir a ERC de que "la estrategia del falso diálogo no ha funcionado", Batet ha defendido una "estrategia compartida para hacer frente común independentista en Madrid" en defensa del derecho de autodeterminación, aprovechando la "posición de fuerza" de la que disponen JxCat y los republicanos en el Congreso.
En la réplica, Aragonès ha pedido aparcar los "reproches" mutuos con JxCat e intentar ponerse de acuerdo en un "frente común".
Los Comunes piden no dar "una segunda oportunidad" a PP y Vox
Por su parte, la presidenta de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, ha hecho un "llamamiento a todas las fuerzas catalanistas del Parlament" a no bloquear un nuevo Gobierno progresista.
"No nos podemos permitir regalar una segunda oportunidad a la derecha y a la extrema derecha", ha alertado Albiach, que se ha mostrado convencida de que las negociaciones "irán bien".
En cambio, la diputada de la CUP Laia Estrada ha arremetido contra la estrategia de diálogo de ERC con un Estado que a su juicio ha demostrado ser "irreformable" y ha apostado por "retomar el conflicto", lo que implica "no facilitar la estabilidad en Madrid".
El PPC propone al PSC una alternativa constitucionalista
Por su parte, el presidente del PPC, Alejandro Fernández, ha emplazado al primer secretario del PSC, Salvador Illa, a aprovechar la "oportunidad histórica para acabar con el procés", ahora que los independentistas "reciben menos apoyo electoral que nunca".
Eso pasaría, según Fernández, primero por "quitarles la influencia en Madrid, en lugar de dar de nuevo la llave" de la gobernabilidad a ERC y JxCat, lo que se debería traducir, a su juicio, en un apoyo de los socialistas a la investidura de Alberto Núñez Feijóo.
En segundo lugar, ha añadido, habría que "construir una alternativa no nacionalista en Cataluña" liderada por Illa, aunque sospecha que el PSC "va a preferir ser rehén de Pedro Sánchez para que lo utilice como moneda de cambio con los nacionalistas para mantenerse él en el poder".