En el marco de las negociaciones para que el candidato socialista, Pedro Sánchez, consiga los apoyos necesarios para formar Gobierno, las formaciones independentistas realizan sus exigencias, conscientes de que se han convertido en actores imprescindibles. Por ello, desde que se conoció el resultado de las elecciones generales celebradas el pasado 23 de julio, en las que ningún grupo había alcanzado la mayoría suficiente para llegar a la Moncloa, el equipo de Sánchez está trabajando para reeditar la coalición.
Conscientes de que el ganador de las elecciones, el popular Alberto Núñez Feijóo, se quedaría a las puertas de ser investido presidente, con 172 votos a favor de los 176 necesarios, PSOE y Sumar empezaron a entablar conversaciones con los independentistas desde final de verano para conseguir los 55 diputados que necesitan.
Tras el fracaso de Feijóo, el rey Felipe VI ha encargado a Pedro Sánchez formar Gobierno, que tiene hasta el lunes 27 de noviembre para ponerse de acuerdo con los independentistas y evitar así una repetición electoral.
El precio que ERC y Junts ponen a Sánchez para investirlo presidente es alto: la amnistía y referéndum. El PSOE se ha mostrado en contra de celebrar el referéndum, pero sobre la amnistía, el presidente del Gobierno en funciones ha confirmado está dispuesto a hablar, aunque por el momento, ha evitado pronunciarse sobre cuál será su posición final.
Para ello, el PSOE ha creado una comisión negociadora de la que forman parte la vicesecretaria general, María Jesús Montero; el secretario de Organización, Santos Cerdán; el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños y la ministra de Educación, Pilar Alegría. En cuanto a Salvador Illa, Carles Puigdemont ha pedido a Sánchez que el líder del PSC se quede fuera de estas conversaciones porque "no podrá ser nunca un interlocutor válido para generar confianza".
Asimismo, para evitar la polémica que se vivió cuando Yolanda Díaz visitó a Carles Puigdemont en Bruselas a final de septiembre, a pesar de que aseguraron que no fue en calidad de vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, sino como líder de Sumar, será Santos Cerdán el que se reúna con él, para que ningún miembro del Ejecutivo aparezca en la foto.
¿Quién es Santos Cerdán?
Santos Cerdán se afilió al PSOE en 1999, donde ha sido miembro de su Comisión Ejecutiva Regional de Navarra desde 2004. Se convirtió en Secretario de Organización de la Ejecutiva Regional en 2012 y, ahora es Secretario de Coordinación Territorial y Relaciones Partido-Gobierno.
Durante su trayectoria profesional, Cerdán ha pasado por diferentes cargos, desde presidente de la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera Alta (2000-2004) hasta teniente de alcalde del Ayuntamiento de Milagro (1999-2003), concejal y portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Milagro (2007-2015) o diputado en el Parlamento de Navarra desde 2014.
En las elecciones generales de abril de 2019 Santos Cerdán fue elegido diputado en el Congreso, cargo que revalidó en las elecciones de noviembre de ese mismo año. En 2021 se convirtió en secretario de Organización del PSOE, tras la dimisión de José Luis Ábalos, del que era su mano derecha.
Asimismo, Santos Cerdán tuvo un papel importante dentro del PSOE durante el escándalo del conocido como Caso Mediador. El secretario de Organización se reunió con Juan Bernardo Fuentes Curbelo, Tito Berni, en el Congreso para exigirle explicaciones y solicitarle que firmase el acta de renuncia.
Asimismo, se esperaba que Santos Cerdán cayese cuando Sánchez anunció una reorganización del partido en julio de 2022, después de su disputa con la entonces vicesecretaria socialista Adriana Lastra, que terminó dimitiendo alegando "motivos personales".
En cuanto a Santos Cerdán, sorprendió cuando se comunicó su revalidación como secretario de Organización socialista.