El próximo 21 de abril, casi dos millones de ciudadanos vascos están llamados a las urnas para elegir la nueva composición del Parlamento Vasco. Estos comicios, convocados por el lehendakari Íñigo Urkullu el pasado mes de febrero, parecen marcar una nueva etapa política en Euskadi, pues ninguna de las fuerzas mayoritarias repetirá candidato el próximo día 21.
El CIS ya ha lanzado algunos pronósticos: el 1 de abril, la encuestadora dirigida por Tezanos afirmaba que EAJ-PNV volvería a ganar las elecciones, con el 36,1 % de los votos, evitando el posible sorpasso de Bildu (33%) del que se ha hablado en tantas tertulias políticas.
Al igual que sucedió en las últimas elecciones autonómicas, del 12 de julio de 2020, el PNV obtendría la primera plaza; Bildu, la segunda; y el PSEE se podría hacer con una tercera posición que le serviría para revalidar el gobierno PNV-PSEE que se ha desarrollado a lo largo de la XII Legislatura.
Las elecciones del pasado 2020
El pasado 12 de julio de 2020, en pleno apogeo de la pandemia de Covid19, acudieron a votar 911.089 ciudadanos del País Vasco, un poco más del 50% del censo electoral de Euskadi. Después del encuentro en las urnas, que coincidió con las elecciones autonómicas de Galicia, Íñigo Urkullu consiguió hacerse con un tercer mandato gracias al apoyo del PSEE de Idoia Mendia.
El PNV obtuvo 349.960 votos y 31 escaños, y EH Bildu, con Maddalen Iriarte, se convirtió en segunda fuerza política con 21 escaños y 249.580 votos. Los socialistas vascos cosecharon 122.248 votos y 10 escaños, y la candidata de Podemos-Ezker Anitza, Miren Gorrotxategi, conquistó la cuarta plaza con 72.113 votos y 6 escaños.
La lista conjunta de PP y Ciudadanos obtuvo 60.650 votos y 6 escaños, y VOX entró en el Parlamento Vasco con 1 escaño y 17.659 votos.
A pesar de su victoria, el PNV se dejó 40.000 votos con respecto al año 2016, y Bildu presentó un crecimiento de 24.000 votos. El PSOE adelantó a Podemos a pesar de empeorar su resultado con respecto a 2016, pues los morados pasaron de los 157.334 votos a los 72.113 de hace cuatro años.
Urkullu salió investido
Tres meses después de estas elecciones, Íñigo Urkullu fue investido de nuevo lehendakari con mayoría absoluta y en primera votación, tras alcanzar un acuerdo con los socialistas de Euskadi, que aportaron 10 votos para revalidar al candidato del PNV como jefe del gobierno vasco. Los diputados de Bildu votaron en contra, y el resto de formaciones en el Parlamento se abstuvieron.
Tras la investidura, se conformó un gobierno de 12 consejerías, 3 de ellas ocupadas por políticos socialistas: Trabajo, Vivienda y Transportes y también Turismo y Comercio recayeron en figuras del PSEE, que en esta legislatura ha ostentado la vicelehendekaritza a través de Idoia Mendia.