En una campaña tranquila, con un candidato nuevo y alejado, pero no separado, de la vieja guardia de la izquierda abertzale, EH Bildu ha presentado un programa político con ambición: quizá el que más, habida cuenta de que, tal y como concluyen las encuestas, podría llegar a ser la primera fuerza en el Parlamento Vasco, superando al PNV.
De esta manera, la coalición soberanista cuenta con un programa de gobierno de nueve puntos, entre los que destacan cuestiones como apostar por la soberanía energética o alimentaria, promover un nuevo pacto educativo, repensar la forma de actuar de la Ertzaintza o promover un nuevo estatus político con el resto de España, que muestre una ambición de país.
Estos son los nueve puntos principales del programa de EH Bildu
En un documento en el que realizan un breve diagnóstico de la situación actual del País Vasco y las soluciones que plantean desde la formación liderada por Pello Otxandiano para estas elecciones, estos son los nueve puntos principales del programa electoral de EH Bildu:
Soberanía estratégica
Proponen reforzar la autosuficiencia –energética, alimentaria, económica, comercial, turística, fiscal y digital– del territorio para hacer frente a posibles problemas globales que puedan darse en un contexto geopolítico cada vez más complejo. El objetivo final sería ir adquiriendo competencias para reformar de manera integral el consumo energético, e impulsar, posteriormente, una transformación verde en el tejido productivo de Euskadi.
Reparto de riqueza
Desde la coalición abertzale creen que el nivel de bienestar de la ciudadanía está estrechamente relacionado con el grado de desarrollo de las políticas públicas y de los servicios públicos. Por ello, proponen volcarse en el sistema público e impulsar mejoras en Osakidetza aumentando, por ejemplo, la plantilla de Atención Primaria en un 10%, en materia de vivienda –limitando el precio de los alquileres en el mercado privado o ampliando notablemente el parque público de alquiler– y en políticas para la juventud, con una Ley para posibilitar la Justicia Intergeneracional.
Transición eco-social
La situación del planeta preocupa a EH Bildu, ya que opinan que se está llegando a límites de colapso evidente, también en el País Vasco. Por ello, proponen que la contratación pública ecológica juegue un papel destacado, también para promover las necesarias relocalizaciones. También proponen transformar los hábitos de consumo, promoviendo la ecologización de todos los ámbitos de la vida. Asimismo, apuestan por revivir las zonas rurales del territorio, impulsando una agricultura y una ganadería ecológicas, que cuiden de los bosques y montes a la vez que realizan su actividad económica.
Sistema educativo
La izquierda abertzale propone desarrollar un sistema educativo público soberano que esté al servicio del desarrollo integral tanto de la ciudadanía de lo que consideran ‘Euskal Herria’, como del desarrollo colectivo de la propia ‘Euskal Herria’: euskaldún, coeducativo, basado en las pedagogías feministas, inclusivo, participativo, laico, democrático, comunitario y público. Una de las primeras medidas que plantearían en caso de llegar a Ajuria Enea sería reformar la Ley de Educación vasca, aprobada recientemente.
Identidad comunitaria
En este apartado se recogen cuestiones relacionadas con la política lingüística, el euskera o la cultura vasca. Impulsarán la gratuidad de la euskaldunización de adultos, apoyarán, mediante políticas públicas, que los ciudadanos puedan consumir productos culturales en euskera, y que puedan dirigirse a la administración en euskera, mediante la renovación del marco jurídico base, o crearán el Estatuto Vasco de las Personas Artistas, Creadoras y Profesionales de la Cultura. El objetivo con estas medidas es recuperar el proyecto nacional de ‘Euskal Herria’.
Libertades democráticas
Dentro de este punto, la formación plantea seguir impulsando leyes de Memoria Democrática, o replantear de manera rotunda la forma en la que se entiende y se plantea la seguridad en Euskadi. Precisamente, creen que el sistema represivo-punitivo no funciona, por lo que plantean un Pacto de Seguridad para una transformación estratégica del servicio policial acorde con los principios de transparencia, cercanía, eficacia, fiscalización y rendición de cuentas ante la ciudadanía.
También en este punto hablan del terrorismo de ETA, nombrándolo como ‘conflicto vasco’: defienden que los ‘presos políticos’ –los etarras condenados por pertenencia a la banda terrorista– están haciendo un recorrido, dentro de la legalidad, para culminar el proceso de su vuelta a casa. Por eso, hablan de que la legislación debe adaptarse a las nuevas realidades políticas mediante la necesaria transformación legal, y proponen el consenso de la mayoría sociopolítica vasca para que las Cortes españolas den los pasos legales oportunos.
Transformación de la administración pública
EH Bildu plantea una administración pública eficaz, transparente y moderna. Precisamente para ahondar en la digitalización de los trabajadores de la administración pública, plantean una Estrategia Integral de Formación para la Adaptación Digital de las y los Trabajadores Públicos, con el fin de lograr su empoderamiento digital.
Gobernanza cooperativa
Poniendo el foco en el movimiento feminista o el colectivo LGTB+, la coalición abertzale cree que para revertir el desencanto con los sistemas democráticos y políticos occidentales hace falta cambiar de modelo de gobernanza. De ahí que planteen medidas como elaborar el Reglamento regulador de Participación Ciudadana, modificar el Reglamento del Parlamento para dar cauce a iniciativas ciudadanas y de distintos agentes sociales o la creación de un departamento específico dedicado a las Políticas Feministas.
Nuevo estatus político
Entre los compromisos que plantea EH Bildu para 2028 en esta materia está conseguir un nuevo modelo basado en otro tipo de relación con el Estado. Pretenden materializar tanto de manera judicial como política el derecho a decidir y para entonces aspiran a tener una relación confederal con España, basada en la bilateralidad, sin que se tenga que subordinar al Tribunal Constitucional, al Congreso de los Diputados o al sistema judicial español.
Para la coalición soberanista el reconocimiento nacional será fundamental durante los cuatro años de legislatura que se abrirán después del 21 de abril.