Este viernes se cierra la campaña electoral para los comicios vascos, que se desarrollarán este próximo domingo 21 de abril: más de 1,7 millones de vascos están llamados a votar para componer un nuevo Parlamento regional, y para elegir al lehendakari que liderará el Gobierno de Euskadi durante los próximos cuatro años.
Después de tres victorias consecutivas de Íñigo Urkullu, el testigo al frente de los jeltzales lo ha tomado Imanol Pradales, un candidato semidesconocido que, por primera vez, podría sufrir un sorpasso a manos de un aspirante de EH Bildu.
Desde el primer momento, Pello Otxandiano ha destacado en las diversas encuestas realizadas las última semanas, que vaticinan los comicios vascos más ajustados de las últimas décadas.
Empate entre PNV y EH Bildu
Ya a inicios de abril, cuando los esfuerzos electorales de los diferentes partidos vascos se intensificaron, las encuestas apuntaban hacia un empate entre PNV y EH Bildu en la primera posición.
El CIS publicado el 1 de abril situó al PNV como primera fuerza con 30-31 escaños, y a Bildu con 28-29: en la tercera plaza situó al PSE-EE con 10-11 asientos en el Parlamento y, por detrás, el PP de Javier de Andrés con 5-6 diputados.
SigmaDos, para El Mundo, también reflejó una ajustada victoria para el PNV, mientras que el Sociómetro elaborado por el Gobierno Vasco pronosticó un empate entre los abertzales y el PNV, que obtendrían 29 asientos cada uno.
Estos datos volvieron a situar al PSE-EE, esta vez liderado por Eneko Andueza, como un importante partido bisagra que podría inclinar la balanza hacia la formación conservadora o hacia la abertzale. Cabe destacar que, en la última legislatura, los socialistas han formado parte del gobierno bipartito de Íñigo Urkullu, que cuenta con 3 consejerías del PSE-EE.
¿Sorpasso de Bildu?
Sin embargo, otras encuestas publicadas en un punto más avanzado de la campaña advirtieron de la posibilidad de un sorpasso por parte de EH Bildu: el pasado lunes, día 15 de abril, una serie de estudios publicados por El País y ABC dieron la victoria a Otxandiano, si bien el sondeo de La Razón volvió a señalar un empate entre los partidos nacionalistas.
En concreto, la encuesta de 40dB para El País y la Cadena SER otorgaba 30 escaños a EH Bildu, 28 escaños a PNV, 10 escaños al PSE-EE y 6 al PP. Vox entraría en el Parlamento Vasco, mientras que Podemos y Sumar pasarían a ser fuerzas extraparlamentarias.
GAD3, para ABC, también estimó entre 28 y 30 escaños para EH Bildu , con un porcentaje de voto del 34,2%. El PNV obtendría un porcentaje de voto mayor, 35,6 %, pero se haría con menos asientos en la cámara vasca, entre 27 y 29. El PSE-EE sería también tercera fuerza según este sondeo, con 10 escaños.
Desde que se comenzaron a publicar, todas las encuestas han pronosticado un auge de EH Bildu y unos muy buenos resultados para la coalición abertzale; si finalmente se produce un sorpasso con respecto al PNV, este se quedaría muy cerca de la formación liderada por Pello Otxandiano.
Se podría reeditar un gobierno del PNV y el PSE-EE
En este escenario, sería el PSEE-EE de Andueza el partido que podría desbloquear la situación: teniendo en cuenta los antecedentes, podría reeditarse un gobierno del PNV y los socialistas si ambas fuerzas consiguen sumar los 38 escaños que conforman la mayoría absoluta en la Cámara vasca.
En caso de que esta suma no fuese suficiente, el PP de Javier de Andrés ha expresado una cierta intención de apoyar esta fórmula bipartita, y cerrar la puerta de Ajuria Enea a EH Bildu, a cambio de "un proyecto en el que se refleje el perfil del PP y se superen algunas cosas".
El PP, según señalan todos los estudios, tendría una cuarta plaza alejada de los tres principales partidos, y Vox podría conseguir un asiento. Elkarrekin Podemos y Sumar, que han presentado candidaturas diferentes, corren el riesgo de quedar sin representación en el Parlamento de Euskadi.