La huelga indefinida del metal en la provincia de Cádiz, a la que están llamados más de 20.000 operarios, ha arrancado con fogatas y algunos cortes de tráfico a las puertas de las grandes industrias como Navantia, Dragados o Airbus.
El ruido del metal se extiende por varios puntos de la provincia
A primera hora de la mañana ya se han podido ver los primeros piquetes en las puertas de la factoría de Navantia en Puerto Real y de otros centros de trabajo. A medida que ha ido avanzando el día ha crecido la tensión. La quema de neumáticos y palés de madera ha obligado a cortar el tráfico en la Avenida de Astilleros.
“Todas las empresas que comenzaban su turno a la medianoche están paradas, así que la respuesta de los trabajadores está siendo muy positiva, porque hemos empezado con el cien por cien de paro en las fábricas con turno de noche”, ha explicado el secretario de FICA-UGT en Cádiz, Antonio Montoro.
Por su parte, también han habido momentos peliagudos en San Fernando. Los manifestantes han iniciado una marcha para la que no tenían permiso y los antidisturbios les han impedido cruzar más allá del Puente de Hierro.
El motivo de la huelga: el bloqueo que sufre la negociación colectiva del sector del Metal
La huelga está convocada por el bloqueo en las negociaciones del convenio colectivo entre los sindicatos y la patronal, ya que los representantes de los trabajadores están reclamando una actualización de los salarios que los empresarios, acuciados por la crisis tras la pandemia, aseguran no poder asumir.
Todos los intentos de acercamiento, incluido un Servicio Extrajudicial de Conflictos Laborales y la mediación de la Junta el pasado viernes, han fracasado hasta el momento, lo que ha dado pie a la huelga indefinida que arranca hoy, y que se suma a los paros convocados dos días de la pasada semana, que derivaron en cortes de tráfico y manifestaciones.
El Gobierno ha dispuesto un dispositivo especial de vigilancia y control de estas protestas con agentes de las unidades de intervención policial (UIP) venidas desde Sevilla y unidades de prevención y reacción (UPR) de toda la provincia, que controlan los puntos y entradas de las fábricas y las principales vías de comunicación urbanas e interurbanas.
La Guardia Civil tiene previstos apoyos de tráfico en la bahía de Cádiz y ha desplegado agentes también en los polígonos industriales y empresas del Campo de Gibraltar, con reservas disponibles por si hay que aumentar el despliegue de seguridad.