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Comienza la recogida del ajo con una cosecha a la baja por la pérdida del 50% de superficie

Un gran número de productores optaron por no sembrar al no contar con los recursos hídricos suficientes

Onda Cero Córdoba

Córdoba |

Comienza la recogida del ajo con una cosecha a la baja por la pérdida del 50% de superficie
Comienza la recogida del ajo con una cosecha a la baja por la pérdida del 50% de superficie | pixabay.com

Comienza la campaña de recogida del ajo en la provincia con una previsión de cosecha menor en un 50% a la de otros años debido a que los agricultores no han sembrado ante la perspectiva de falta de agua para regar sus explotaciones. Muchos agricultores optaron en el momento de la siembra por no hacerlo, ya que no se contaba con los recursos hídricos suficientes para garantizar el cultivo.

Según los datos que se manejan desde la Sectorial del Ajo de la organización agraria ASAJA, esta disminución respecto a la temporada anterior, que ya experimentó una bajada sensible, supone que la superficie total se quedará muy por debajo del millar de hectáreas, una cifra que contrasta con las 2.000 que se han registrado en los últimos años y que, según el presidente de la Sectorial, Miguel del Pino, “obviamente repercute en una brusca disminución de la producción”.

Del Pino ha explicado que el ajo requiere una inversión anual muy cuantiosa que oscila entre , entre los 12.000 y los 13.000 euros por hectárea, por lo que el hecho de que en el momento en el que se llevó a cabo la siembra, entre octubre y diciembre, “no hubiera muchas esperanzas entre los productores de poder contar con agua para que la cosecha fuera rentable por el estado de la Cuenca del Guadalquivir, provocó que optaran por no cultivar en la provincia. Finalmente los productores de ajo sembraron en provincias como Granada, Málaga o Ciudad Real con más recursos hídricos.

En su opinión, parece que la situación para la próxima campaña “puede ser más halagüeña”, con las dotaciones hídricas para verano y otoño que recientemente ha aprobado la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, (CHG), y que son superiores a los 750 metros cúbicos por hectárea aprobados el año pasado. No obstante, hay que seguir lamentando la situación del Genil-Cabra, de mucha importancia para los municipios donde se siembra la mayor superficie del ajo y por el que apenas circula el agua al estar colmatado de barro.

En cuanto a la calidad del producto, a pesar de una menor cosecha, se espera que sea magnífica, pero siempre dependiendo de las condiciones meteorológicas.

En referencia a las cotizaciones, Miguel del Pino ha afirmado que “parece que ahora mismo hay unos precios interesantes como consecuencia de la menor cantidad de existencias en el mercado”, pero hay que esperar que esta inercia continúe en los próximos meses siempre que no sigan llegando producciones desde Egipto, como viene ocurriendo últimamente.

Desde la Sectorial del ajo de ASAJA, se desea destacar que en los últimos años ha disminuido notablemente la rentabilidad del cultivo debido al fuerte incremento de los costes, lo que también contribuye a la pérdida de superficie en los últimos años. A ello también ha ayudado las limitaciones impuestas desde la Unión Europea para el uso de determinados productos fitosanitarios.