El Granada CF volvió a perder. En este caso lo hizo en un gran escenario y ante un fenomenal equipo, la Real Sociedad. Pero perder ahí no es lo extraordinario. Puede que sí lo sea el haberlo hecho de forma consecutiva en cuatro ocasiones. Tal vez lo que más preocupen son las sensaciones que nos deja un partido, en el que el conjunto rojiblanco volvió a mostrar que las nuevas fórmulas empleadas por su entrenador no son las más adecuadas para ganar partidos en primera división.
Este "nuevo equipo" está compuesto, cada vez más, por los jugadores que han llegado ahora en el mercado de invierno. Está sucediendo justamente igual que cuando comenzó la temporada. Aquellas primeras jornadas Robert Moreno apostó por los futbolistas recién llegados. Todos saben lo que sucedió, una situación negativa que experimentó un agradable cambio cuando el técnico se dio cuenta que los futbolistas que quedaban de la temporada europea eran mejores que los que el nuevo cuerpo técnico había adquirido para este nuevo proyecto. De esa forma el equipo llegó a conseguir cinco victorias, veinticuatro puntos, y estar cerca de la salvación matemática. Lamentablemente, cuando se ha abandonado esa fórmula, los resultados han dejado de llegar y la imagen de este Granada CF no convence a nadie. La lógica impone un paso atrás y volver al camino correcto. No debe ser tan difícil encontrarlo.
