Así consta en el escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press y según el cual estos individuos estaban coordinados con otro que tiene prohibida su reentrada en España por otra causa y que administraba de "forma piramidal" el grupo.
Desde un terminal telefónico extranjero, recibía los pedidos y era "ordenante de las entregas a realizar, que encargaría a cada uno de los repartidores latentes en espera, según la labor encomendada a cada uno de los coacusados".
Supuestamente recibían "por servicios de paquetería una veintena de envoltorios en cada remesa y a la espera de su liquidación tras la venta, percibiendo a cambio un salario fijo mensual estimado en unos 2.000 euros" y "sabedores los cuatro coacusados de la ilicitud de las operaciones proyectadas".
Uno de ellos fue detenido el 7 de noviembre de 2019 "conduciendo una bicicleta" en el interior de cuya barra del sillín habría llevado "tapada con plastilina común, 33 papelinas con envoltorios de diversos colores".
Están acusados por la presunta comisión de delitos contra la salud pública, por el que se les piden penas de cuatro años y medio de prisión y la multa de 10.000 euros, y de pertenencia y cooperación activa a organización criminal, que suma una solicitud de un año y seis meses más.