Así lo ha indicado la Policía Nacional en una nota de prensa relativa a unos hechos que se remontan a principios del mes de mayo del presente año. Fue en ese momento cuando se recibió en dependencias policiales la denuncia de un ciudadano, quien manifestó haber sido víctima de un robo en un piso de su propiedad que utilizaba como segunda vivienda y que no había visitado desde que se inició el periodo de confinamiento el año pasado. El propietario denunció la desaparición de una serie de objetos y la existencia de una serie de daños en el interior del piso robado.
El presunto autor habría escalado por la fachada del edificio hasta el tercer piso, accediendo tras forzar la puerta de un trastero o galería que había hecho en el balcón. Una vez en el balcón, habría forzado igualmente una puerta corredera de cristales, posibilitando de esta manera "su acceso al interior de las habitaciones del inmueble".
Ya dentro del piso, el detenido habría comenzado a sustraer electrodomésticos de la vivienda, para lo cual hubo de forzar desde dentro la puerta principal del inmueble para poder sacarlos hasta la calle. Entre los objetos denunciados aparece una televisión de 50" valorada en unos 600 euros, una lavadora, un calentador, dos bombonas de butano y varios juegos de sábanas. También habría intentado sustraer el horno de la cocina, pero sin conseguirlo, habiendo causado daños en el mismo.
La investigación policial, que comenzó con la inspección ocular del inmueble, consiguió identificar al presunto autor del robo, un varón de nacionalidad rumana y 38 años, el cual acumula numerosas detenciones y antecedentes penales por hechos similares. Una vez identificado se inició la búsqueda del mismo, siendo detenido finalmente durante la segunda semana de agosto. El presunto autor ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial, habiéndose decretado su ingreso en prisión.