Estos cien nuevos cañones, adquiridos este verano para la temporada invernal 2020/21, quedaron a finales de septiembre totalmente instalados en el dominio esquiable, lo que propició a su vez la reubicación de 44 dispositivos y la baja definitiva de otros 43 con más de 15 años de servicio. En total, Sierra Nevada dispone ya de más de 300 cañones de producción de nieve, casi todos automáticos, según informa Cetursa, la empresa pública que gestiona la estación de esquí.
Los nuevos TR10 (15 fijos y 4 móviles) y TL6 (81 unidades) destacan por su alto rendimiento en condiciones marginales y alta eficiencia en el consumo de luz y agua. Así lo pudieron comprobar la temporada pasada los técnicos de Sierra Nevada y de Techno Alpin (la multinacional italiana líder en el sector de nieve producida) con los 33 cañones de los mismos modelos adquiridos hace un año.
Las nuevas adquisiciones han sido distribuidas fundamentalmente la columna vertebral de la estación, desde la superior del Telesilla Stadium (3.000 metros) hasta Pradollano (2.100 metros) pasando por la zona Principiantes de Borreguiles. Su instalación tendrá gran incidencia en las partes bajas del dominio esquiable, con especial protagonismo en los tramos finales de pistas como El Río, Maribel y Loma de Dílar.
Los 44 cañones recolocados, que aún presentan un aceptable rendimiento, han sido trasladados, entre otras pistas, a la Zahareña. Está previsto, una vez empiece la temporada, mover varios de ellos a la cabecera de la pista negra Fuente del tesoro. Sierra prevé su apertura en las fechas habituales, el último fin de semana de noviembre, si las condiciones de nieve lo permiten.