Estas fuertes rachas de viento en forma tubular se llevaron por delante parte del tendido eléctrico y números árboles en varias fincas aunque afortunadamente no llegaron a los cascos urbanos. El más afectado, el propietario de la finca que quedó literalmente arrasada por el tornado: se llama Paco Palomo, y tenía cerca de 200 cabezas de ganado, más de una cuarta parte de ellas perdidas tras el fenómeno de ayer.
En Sierra de Yeguas también se dejó sentir el temporal. En el campo, se ha perdido ya entre el 25 y el 30 % de la aceituna de verdeo.
En explotaciones fundamentalmente de olivar de estos términos se han registrado cuantiosos daños por granizo, así como una copiosa caída de aceituna por la acción de los fuertes vientos. Ha habido explotaciones olivareras que han sufrido, igualmente, arranque de ramas e incluso árboles enteros. El sistema de riego también se ha visto afectado. En los casos de roturas de ramas urge hacer tratamientos cúpricos para prevenir enfermedades.
Dato destacado: tanto Campillos, como Sierra de Yeguas, como Teba, afectados ayer, fueron también puntos negros en el temporal de octubre de 2018: han pasado diez meses y sus ayuntamientos siguen esperando las ayudas comprometidas por el gobierno central, tras la riada que se cobró la declaración de zona catastrófica y que causó daños por valor de más de 4 millones de euros.