Los policías locales, que prestaban su servicio de paisano y en un vehículo camuflado, procedieron a realizar una inspección del local en la Palmilla. Identificaron al propietario, un hombre de 43 años -natural de Málaga y con domicilio en el lugar de los hechos-, comprobaron que en el interior había cinco menores, tres de ellos de tan solo 13 años y otros dos de 15, fumando en cachimba un producto derivado del tabaco y con nicotina, lo que provocaba que hubiese una gran cantidad de humo en el ambiente.
Además, ni los menores ni el propietario guardaban la mínima distancia de seguridad ni hacían uso de las mascarillas, incumpliéndose las medidas sanitarias aplicables motivadas por el coronavirus.
Establecimiento irregular
En concreto se trataba de un piso que había sido rehabilitado como establecimiento para la actividad de bar, con una puerta abierta al exterior y una escalera de hierro acoplada a la misma para dar acceso sin tener que pasar por el portal del bloque. El interior del establecimiento se encontraba diáfano, sin tabiques interiores, contando con barra, cocina con campana extractora, diez cachimbas, dos neveras, una de ellas industrial, juego de futbolín, máquina recreativa y de azar tipo B, mesas, sillas y zona de sofás con mesas bajas, aparatos de sonido y una televisión colgada en la pared.
Los policías locales levantaron acta de denuncia a todos los presentas por el incumplimiento de las medidas de prevención y contención ante la Covid-19 en lo que a distancia de seguridad y uso de mascarillas se refiere, así como por la venta de cachimbas para su consumo en mesas de manera compartida. Los policías locales procedieron al desalojo y cierre del establecimiento, quedando nuevamente informado su propietario de las consecuencias legales que asumiría con su incumplimiento y desobediencia.
Reincidente
El local ya fue desalojado y cerrado por efectivos de la Policía Local de Málaga el pasado 25 de octubre en una intervención en la que se denunció a un total de 36 personas que fueron sorprendidas celebrando un cumpleaños en el que compartían cachimbas y se incumplían otras medidas sanitarias frente a la Covid-19, ya que no se guardaba la distancia personal ni entre mesas.
En aquel momento, además, en el registro los policías locales localizaron dos defensas extensibles, así como un trozo de hachís, reconociendo el propietario que todo era suyo, por lo que fue denunciado por la posesión de las armas prohibidas y de la sustancia estupefaciente.