El investigado exigía importantes sumas de dinero a sus víctimas por medio de amenazas e incluso agresiones físicas.
El botín conseguido por el arrestado habría ascendido a más de 6.000 euros según la investigación.
Hasta 2.000 euros
Para obtener un mayor lucro, el arrestado llegó también a fingir que era menor de edad y amenazaba a los perjudicados con denunciarles por abusos sexuales o difundir imágenes íntimas del encuentro entre ellos a terceros. En una ocasión llegó a obtener 2.000 euros.
A prisión
El investigado, que ya contaba con antecedentes por delitos de la misma naturaleza, fue detenido por su presunta responsabilidad en cinco robos con violencia o intimidación, ingresando en prisión por orden judicial.