El aumento de las inversiones en un 20%, en las que se da prioridad a las actuaciones en materia agua, y el incremento del gasto social en casi un 17% marcan los presupuestos de la Diputación de Málaga para el próximo año 2024, cuya aprobación inicial se debatirá en Pleno la semana que viene.
El presidente de la institución provincial, Francisco Salado, ha indicado que los presupuestos se incrementan en un 2,41% respecto a las de este año y alcanzan los 441,3 millones de euros en todo el sector público provincial.
Los presupuestos están integrados por los de la propia Diputación (315,5 millones de euros); el Patronato de Recaudación Provincial (41 millones); Turismo y Planificación Costa del Sol (15,3 millones); Consorcio Provincial de Residuos Sólidos Urbanos (33,84 millones); del Consorcio Provincial de Bomberos (29,89 millones); y Consorcio de Agua (4,28%), entre otros.
Salado ha lamentado que la "incertidumbre" y la "inestabilidad política" hayan dificultado la elaboración de las cuentas de la institución, ya que este año, por primera vez, no ha habido ninguna indicación por parte del Gobierno en funciones sobre los fondos a recibir por parte del Estado, por lo que, ha dicho, se ha optado por la prudencia, manteniendo una cantidad similar a la de este año. En este sentido, ha indicado que más del 80% de los fondos de la Diputación proceden de la Participación en los Ingresos del Estado (PIE).
El presidente ha ido más allá al expresar su "honda preocupación" por el contenido de los acuerdos de investidura que el PSOE ha alcanzado con los independentistas. "Acuerdos que suponen un ataque frontal a la Constitución, a la separación de poderes, al marco de convivencia que le hemos dado los españoles desde la transición y un ataque a nuestra tierra. Son una amenaza para el equilibrio territorial y la financiación de Andalucía y, por ende, de la provincia de Málaga. Estos acuerdos van a suponer menos fondos económicos para las necesidades de la provincia, estoy convencido de ello", ha dicho Salado, a la vez que ha subrayado su pesimismo.
"La Diputación de Málaga defiende la Constitución, la separación de poderes, la independencia de la justicia y el principio de solidaridad territorial. Por lo tanto, estaremos muy vigilantes para denunciar cualquier agravio a nuestra provincia, aunque me temo que va a resultar difícil que baje más la cifra de inversión el Gobierno de Pedro Sánchez en la provincia de Málaga de lo que han sido estos cuatro años", ha concluido al respecto.
Ejes fundamentales
Por otra parte, Salado ha desgranado algunos de los ejes fundamentales de las cuentas de la Diputación de Málaga: aumento de las inversiones; incremento de las actuaciones de protección y promoción social hasta los 98,8 millones de euros; transferencias de 64,4 millones de euros a los ayuntamientos, de los que 36,2 millones de euros corresponden a inversiones y 28,2 para gastos corrientes y fondos incondicionados; y ayudas al sector agroalimentario y a las empresas, que se plasman en 6,9 millones de euros.
Las inversiones directas por parte de la Diputación y los consorcios se incrementan un 20%, pasando de 27,3 en 2023 a 32,8 millones de euros en 2024. A ellas se unen las transferencias a ayuntamientos y entidades para inversiones, que alcanzan los 41,5 millones de euros. Y también se ejecutarán otras inversiones, no incluidas en el presupuesto, que se financiarán con el préstamo solicitado para el Plan Málaga para la recuperación de la provincia tras la pandemia, del que quedan 44 millones de euros. Así que el importe global de inversiones alcanza los 118,3 millones de euros.
Agua
Salado ha apuntado como "prioridad" la apuesta por las inversiones centradas en obras hidráulicas y en la mejora del abastecimiento y reciclaje de agua. Al respecto, ha explicado que se destinan 15 millones de euros del préstamo a un plan especial de inversiones en la Axarquía en obras hidráulicas y mejora de abastecimiento de agua potable, como depósitos, pozos, depuradoras y canalizaciones.
