Todos los pacientes que ingresan en esta unidad con Covid-19 padecen insuficiencia respiratoria, por lo que es necesario intubarlos y conectarlos a ventilación mecánica para suplir el fallo respiratorio ocasionado por la mala evolución del daño ocasionado por el virus. Cuando no es posible extubar al paciente, los médicos intensivistas, en colaboración con la cualificada enfermería de la unidad, realizan una traqueotomía percutánea que favorece el acceso rápido a la vía aérea y permite la desconexión al respirador, si bien esta opción se emplea como alternativa al tratarse de una técnica más invasiva.
Desde el comienzo de la pandemia, ocho de los pacientes ingresados en la UCI del Hospital Regional de Málaga han sido dados de alta en los últimos días. “Después de probar si puede respirar sólo con los respiradores adecuados, se procede a la extubación. Si la tolera es un éxito”, explica el director de la unidad, Guillermo Quesada.