Sacyr ya había vendido en octubre de 2019 otro 47,5% de la concesión, en ese caso al fondo Aberdeen Infrastructure. De esta forma, con la operación cerrada ahora, Sacyr se queda con una participación del 5% en la autopista, la única que le quedaba en España, que además seguirá explotando y manteniendo. La compañía, tal como indicó cuando acordó ambas transacciones, destinará los recursos obtenidos a seguir avanzando en su objetivo de reducir su deuda corporativa.
La AP-46 Alto de las Pedrizas-Málaga es la autopista más 'joven' de la actual red de vías de peaje del país. De 28 kilómetros de longitud, une Málaga y Antequera y está en servicio desde 2011. A cierre del pasado año, registraba un tráfico medio diario de 15.605 vehículos, un 4,67% más.
Sacyr completa esta desinversión mientras trabaja en el diseño de su nuevo plan estratégico a 2025, con el que reforzará su apuesta por las concesiones y los proyectos sostenibles.