Al parecer, la Policía dio con el video tras identificar a tres personas que portaban material para realizar pintadas y una cámara de vídeo. Tras la autorización judicial, la Policía pudo visionar el material existente en la cámara e identificar al presunto autor de los grafitis, que cuenta con antecedentes penales, y al que al que ya se ha imputado un presunto delito contra el patrimonio histórico. Al mismo tiempo, las autoridades esclarecían que el mismo era el presunto autor de un delito contra la integridad moral de una persona discapacitada, a la que daba un trato degradante, incitándole a que se comiese una lagartija. El joven, de 21 años, está siendo investigado.