Puerto Rico ya es propiedad del Ayuntamiento de Marbella. Pero sólo sobre el papel. Es éste un claro ejemplo de que una cosa es la teoría y otra la práctica.
Recapitulemos. Resulta que hace tiempo, ese gran espacio natural que ocupa una superficie equivalente a unos 50 campos de fútbol, de los grandes, de los de Primera División, se vendió. No entraremos en por qué, ni quién, ni siquiera a quien. Y ahora, todo ese tiempo, el que sea, pero mucho, después, es del Ayuntamiento. Pero eso es lo que figura en los documentos.
Porque ahora viene lo bueno. Ahora viene la práctica. Ahora hay que echar a los que llevan allí asentados de manera ilegal unos dos años. Con su muro levantado y todo. Porque yo lo valgo, y porque me lo permiten, claro.
Salir de allí, saldrán. Eso seguro. La incógnita es en cuánto tiempo.
A ver si para el “tostón” del próximo noviembre está la parte práctica resuelta también y recuperamos la tradición.
No parece tan difícil.
