La semana previa al paro, los empresarios, previendo el escenario, se aprovisionaron de materiales pero se empiezan a agotar y apenas durarán tres o cuatro días, según cuenta el director técnico de Jamena Construcciones, Jesús Sánchez. Pero también la obra pública se resiente de manera importante. 22 actuaciones del Ayuntamiento de Marbella están paralizadas y otras cinco no pueden siquiera comenzar, cuenta el delegado municipal, Diego López.
El paro se siente también en la hostelería con una especie de efecto dominó: no llegan alimentos a los supermercados o tiendas, y algunos bares no pueden ofrecer su servicio completo, lamentan los presidentes de APYMEM y APYMESPA, Enrique Guerrero y Ana García. El panorama además empeora al tener la Semana Santa a la vuelta de la esquina, como apunta el presidente del CIT, Juan José González. Con vistas a la festividad mira también el sector de los chiringuitos. De momento subsisten pero nutriéndose de alimentos que llegan desde más lejos de lo habitual, Portugal incluso, advierte el presidente de la Asociación de Locales de Playa de Málaga, Manuel Villafaina.
El sector que de momento apenas padece los efectos de la huelga es el de los hoteles. Se lo vio venir, dice el vicepresidente de AEHCOS en Marbella, Fernando Al-Farkh.
Sigue lloviendo
La lluvia que volvió ayer tarde a hacer acto de presencia en la Costa de Sol se traduce en hasta 180 litros por metro cuadrado en las últimas 24 horas en la zona de Los Reales en Estepona, el área con más precipitaciones acumuladas de la comarca hasta el momento. Su Ayuntamiento mantiene activo su Plan Municipal de Emergencia ante el riesgo de desbordamiento de ríos y arroyos. Ayer ya ocurrió con el Almárchal que obligó a cortar la carretera que une la zona norte del municipio con Genalguacil. Hay vías sin acceso en El Burgo, Jubrique y Casarabonela. También mantienen activos sus planes Marbella, Coín y Fuengirola.