El Senado aprobó ayer la catalogación de un espacio con un ecosistema único, un pinsapal como no lo hay en otro lugar del planeta y un gran valor hidrográfico repartidos entre los 14 municipios que lo integran, que pasan a formar parte de un club exclusivo y a los que les reportará numerosos beneficios. La denominación no sólo implica una protección extra de su naturaleza sino una oportunidad para que las localidades, pequeñas en población, aumenten su censo y su capacidad productiva, según explican los alcaldes de Istán y Ojén, José Miguel Marín y José Antonio Gómez, respectivamente.
Las administraciones superiores deberán ahora invertir para mejorar las conexiones e infraestructuras de toda la zona. La declaración es también importante para las localidades vecinas, como Marbella, considera la alcaldesa, Ángeles Muñoz, que en su calidad de senadora defendió ayer en la Cámara Alta la catalogación.
