En pleno centro de Fuengirola, el Mesón de Andrés te lleva a la mesa con comida tradicional, haciendo un pequeño guiño a la cocina castellano-leonesa. En una era de efusividad y novedades, el mesón de Andrés ha conseguido fusionar la cocina clásica con la novedad, acercando la cocina al cliente como prioridad.
Un negocio que nació con su propio CEO trabajando con 13 años en un restaurante familiar, donde aprendió el oficio de la hostelería. Un mesón con casi 14 de años de experiencia donde nos definen su plato estrella como sus clientes, ya que para ellos lo son todo. Sin embargo, si tienen que elegir entre uno de los platos de su carta se decantan por la alcachofa confitada a la marinera.
Sin dudarlo, una referencia que tienen todos los clientes que pasan por el restaurante es el plato de jamón y el de cecina, llevándonos hasta esa cocina tradicional leonesa, combinándose a su propia vez con los tartares que modernizan el mesón. En adjunto, un restaurante donde los platos tienen como nos cuenta su dueño "tiene fondo".
En definitiva, un restaurante para disfrutar de la comida de calidad en un remanso tradicional.