La Concha, Los Reales, La Palmitera, el Pico de Mijas, Carramolo. Son las cimas que resguardan por el norte a toda la Costa del Sol Occidental y en las que hay cientos de caminos, senderos, rutas, veredas, trochas que disfrutar, unos atractivos turísticos más para la zona, que presume de aglutinar a partes iguales el famoso sol y playa, con la tranquila montaña.
Basta tener unas buenas botas o zapatillas específicas, una camiseta de secado rápido, crema protectora, una gorra o sombrero y quizá unos bastones que te ayuden a mantener el ritmo. También un ‘cortavientos’ por si aparece la lluvia. Con eso y algo de agua y comida será suficiente para disfrutar de la Vereda del Faro, Los Monjes, Juanar, Istán y otros tantos lugares que recorrer o a los que llegar.
Hay recorridos para todos los gustos y exigencias: desde los cómodos senderos locales, hasta las largas GR. Los más abundantes son los intermedios; los PR, entre los que hay algunos que se pueden transitar en familia y otros para los que se requiere cierta forma físíca. Pero en todos ellos hay un común denominador: la recompensa de unas vistas increibles una vez que se ha alcanzado el punto más alto.