El horario de cierre se encontrará ligado a las medidas marcadas por la autoridad sanitaria, la Junta de Andalucía, ante la pandemia originada por el covid-19, mientras que el horario final de la semana de la Feria está pendiente de que finalmente se decida si habrá clases en los colegios durante esas jornadas.
En este marco, los ciudadanos podrán disfrutar de más de un centenar de atracciones, así como de más de cien establecimientos burger, churrerías o tómbolas en un ambiente "más familiar y tranquilo", que se acerca más al modelo de parque de atracciones y se aleja del de feria tradicional, todo ello contando con todas las medidas de seguridad sanitarias pertinentes.
De hecho, el recinto ha llegado a triplicar la distancia entre las atracciones existentes con respecto a su situación habitual antes de la pandemia, lo que ha provocado que sean muchos los negocios que han quedado fuera ante la falta de capacidad del espacio para albergarlos. "Era el único modo de establecer todas las medidas de seguridad para evitar aglomeraciones y mantener las distancias de seguridad", inciden desde la asociación.
Este parque de atracciones se pretende establecer como un nuevo modelo para los empresarios de este sector ya que, una vez que finalice en Sevilla, se prevé que se desarrolle en los mismos términos en otras ciudades andaluzas. "Tras año y medio sin ferias, esperamos que esto suponga un punto de inflexión, el botón que active la campaña de trabajo", explica, mencionando ciudades como Carmona (Sevilla), donde ya está confirmado su desarrollo, así como se analiza en Jerez de la Frontera (Cádiz), Córdoba, Huelva o Dos Hermanas (Sevilla).