El acto ha congregado a altos representantes del Ministerio de Defensa, la Dirección General de Armamento y Material (DGAM), el Ejército de Tierra y las empresas que conforman la sociedad que gestiona estos programas tecnológicos, Santa Bárbara Sistemas, Indra Sistemas y Sapa Placencia. A la reunión han asistido el general jefe de Estado Mayor del Ejército, general de Ejército Francisco Javier Varela Salas; el director general de Armamento y Material, almirante Santiago Ramón González Gómez; y el director adjunto al DGAM, general Francisco Javier Abajo Merino. También participaron el director general de GDELS-SBS; Juan Escriña, el consejero ejecutivo director general de Transporte y Defensa de Indra, Ignacio Mataix; y el consejero delegado de Sapa, Ibon Aperribay.
Después de que la licitación inicial del contrato correspondiente a la fabricación de 348 unidades de serie del nuevo vehículo militar quedase desierta el pasado mes de diciembre, las partes renegociaron el contrato y, como ha explicado el secretario de Estado de Defensa, a día de hoy están en la cadena de fabricación cinco prototipos que reflejan "tecnologías maduras que admiten ya la fase de producción", con lo que el 3 de julio dos de ellos realizarán unas primeras pruebas de tiro en Zaragoza y un tercer prototipo hará lo propio a finales de ese mes.
Además, ha insistido en la idea de que el Ministerio de Defensa espera firmar en agosto con la sociedad constituida entre Indra Sistemas, Santa Bárbara Sistemas, Sapa Placencia y Escribano Mechanical & Engineering el contrato correspondiente a la fabricación y suministro de 348 unidades de este nuevo modelo de vehículo blindado, lo que se traducirá en 650 empleos directos y unos mil indirectos en Asturias, Sevilla, Guipúzcoa y Madrid.
Por ello, ha manifestado que el proyecto de fabricación de dicho vehículo blindado no es sólo un "pilar esencial para la defensa nacional" y la proyección de las Fuerzas Armadas españolas en misiones en el extranjero, sino además un revulsivo para la industria al desarrollar "tecnologías punta" y también para el empleo. Dichos vehículos se entregarán en un plazo estimado de siete años desde la firma del acuerdo del programa, previsiblemente en agosto según el secretario de Estado de Defensa, quien ha remarcado que el mismo conlleva "un ambicioso plan industrial nacional", que facilita mantener la autoridad del diseño en España y favorece una alta participación de la industria nacional en este, en un porcentaje no inferior al 70 por ciento.