El Hotel Renacimiento. ha acogido la primera junta ordinaria tras la ampliación de capital de 42 millones de euros. La primera en la que Ángel Haro y José Miguel López Catalán controlan el 39 por ciento del accionariado. Recordemos que hace unos meses el presidente y el vicepresidente se gastaban algo más de 25 millones de euros en acciones.
Así pues, la de este martes ha sido una junta sin sobresaltos en las votaciones. Todo atado y bien atado. Ahora los minoritarios controlan algo más de un tercio del capital. Y con el nuevo panorama accionarial, otros accionistas de relevancia son Joaquín Caro Ledesma, que controla más de un 8%, la familia Galera, con casi un 4% y Joaquín Sánchez, por ejemplo, controla ahora más de un 3% del accionariado.
Ha estado representado en la junta el 75,10% del capital social. Es decir, presentes 176.479 acciones de las 235.000 que completan el total del mapa accionarial del club. Los accionistas han aprobado un presupuesto de 143 millones de euros y unas cuentas del pasado ejercicio con un ligero superávit de 321.000 euros. Y se ha votado afirmativamente la modificación de hasta 22 artículos de los estatutos del club para adaptarlos a la nueva normativa con dos especialmente polémicos: a partir de ahora, no será necesario que los presupuestos sean aprobados en la junta de accionistas – aunque con la situación accionarial actual no hay peligro de que no se aprueben – y el otro punto que generaba mayor revuelo es que se permitirá la entrada de capital extranjero en el club.
En su discurso habitual ante los asistentes, el presidente del Betis, Ángel Haro ha señalado que "los jugadores son un activo y nuestra estrategia es mantener el nivel, pero reduciendo ahora el coste. Con ventas de 45 millones, el beneficio ha sido sólo de 321.000 euros. A corto plazo, tendremos plantillas cortas, máximo de 22 jugadores de plantilla más canteranos".