Fuentes del propio centro hospitalario han dejado claro que esto no afecta ni a las intervenciones urgentes ni a las oncológicas, sino a otras cuyo aplazamiento no supone un riesgo para el paciente.
De hecho, indican que esas operaciones no urgentes se valoran a diario para ver si pueden ser realizadas de forma inmediata o se les otorga una nueva fecha. Para tomar esa decisión, se valoran de forma continua las necesidades del hospital, teniendo en cuenta el número de camas existentes y disponibles, el número de ocupación de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y la postcirugía.
De este modo, cuando no hay camas suficientes, se suspenden las intervenciones ese día y se les otorga de nuevo otra nueva fecha para su realización. Esta reprogramación de intervenciones, adelantada por el diario ABC, se encuentra enmarcada dentro del plan de contingencia del centro hospitalario.