La investigación comenzó a raíz de que una empresa del citado municipio, a principios del presente año comenzó a recibir correos electrónicos en los cuales le adjuntaban fotografías de sus operarios incumpliendo, supuestamente, la normativa en materia de prevención de riesgos laborales.
Estos correos fueron remitidos desde una dirección electrónica que simulaba proceder de la Inspección de Trabajo de la Tesorería General de la Seguridad Social. El remitente se presentó como supuesto inspector y tras mantener contacto a través de ese medio con el propietario de la empresa, le habría planteado "evitar las cuantiosas sanciones previo pago de una cantidad de dinero que superaba los 2.000 euros". Para ello incluso le facilitó una cuenta bancaria.
En el marco de la denominada Operación Cameraman y fruto de un arduo trabajo de investigación policial, se ha logrado, identificar, localizar y atribuir el delito de estafa, en calidad de investigado a un oriundo de la localidad de Las Cabezas de San Juan (Sevilla) y residente en Lebrija.
