La de Sevilla, ubicada en la zona del aeropuerto y en la que anualmente se reparan una media de diez aeronaves, es una de las tres que el Ejército del Aire tiene en España, junto con las de Albacete y Madrid. La de la capital hispalense, que responde a las siglas Maese), cuenta con tres "singularidades" y una plantilla de medio millar de profesionales, entre personal militar y civil.
En primer lugar, un taller de reparación de hélices "único en España y uno de los primeros de Europa", en el que al año se arreglan 150 palas y 60 hélices. Su reto es lograr la reparación de las hélices del A400M, extremo que depende del acuerdo que alcancen Airbus y el Gobierno de España, apuntan fuentes de Maestranza Aérea. Para ello, haría falta "reforzar" las instalaciones de Maestranza Aérea tanto con recursos humanos como materiales, ha aclarado Manuel Carretero, jefe del taller de hélices.
La segunda singularidad de este recinto militar es su taller neumático y, por último, el de tratamientos términos y superficiales. El Rey, que ha llegado a la Maestranza Aérea a las 10,00 horas en helicóptero, ha recorrido tres talleres y dos hangares. En uno de ellos, se está realizando en estos momentos una revisión "estructural" al primer A400M que se le entregó a España hace seis años ya. Esta operación requiere de nueve meses. Una vez termine, los operarios de la Maestranza Aérea repararán un segundo A400M.
Además, el Rey ha podido comprobar el estado de la nave en la que hizo sus primeras prácticas del Ejército del Aire, un ECO-26 (Tamiz). Este modelo dejará de volar a partir de julio y será sustituido por la ECO-27. La Maestranza Aérea de Sevilla es cabecera técnica de los modelos ECO-26, C-295 y del A400M, tal como se le ha explicado a Felipe VI, recibido por el jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, Javier Salto Martínez-Avial; por el coronel jefe de Maestranza Aérea, Javier Elvira Serrano; el jefe del Mando de Apoyo Logístico, el teniente general José Luis Pardo Jario; y el jefe del Mando Aéreo, el general de división Julio Nieto Sampayo.
Tras las más de dos horas que ha estado Felipe VI conociendo el funcionamiento del primer centro nacional de mantenimiento y reparación de aeronaves en España, se ha desplazado hasta la base de Tablada, donde ha inaugurado el monolito dedicado a su bisabuelo, el Rey Alfonso XIII, que, en abril de 1923, inauguró las instalaciones, una de las cuatro zonas aéreas creadas por Decreto en 1920, siendo la de Sevilla la de la zona sur.
Desde los terrenos de Tablada, que ya ha cumplido el centenario, se inició la aviación comercial española en 1921 con el primer vuelo de la línea aeropostal Tablada-Larache (África) con un Havilland DH-9 de la Compañía Española de Tráfico Aéreo (CETA). En 1979, la Maestranza Aérea de Sevilla alcanzaba su récord de revisiones y reparaciones de aeronaves con 65 unidades intervenidas. A principios de los noventa, la Maestrana sufría el cierre de la pista de Tabalda al tráfico aéreo debido al trazado de la SE-30, que se "interpone entre la pista y los hangares". En 1995, lo hangares se mudaban a las instalaciones actuales, en San Pablo.